Manacapuru, Brasil.

Varios afluentes del río Amazonas, uno de los más largos y caudalosos del mundo, se encuentran en una "situación crítica de escasez" de agua por la sequía histórica que afecta a Brasil. Así lo declaró el lunes la Según la Agencia Nacional de Aguas.

Detalló que los ríos Iriri y Xingú, que limentan la importante hidroeléctrica de Belo Monte, se encuentran "por debajo de los niveles mínimos para esta época del año”.

La declaratoria de "situación crítica" estará vigente hasta el 30 de noviembre y permitirá que la agencia "modifique las normas de uso del agua" en las áreas vecinas a estos ríos.

Unos 900 kilómetros al oeste, en el estado de Amazonas, el nivel del río Solimoes bajó a apenas tres metros en el municipio de Manacapuru, un récord histórico según la Defensa Civil.

El suministro de alimentos y agua potable obliga a los pobladores a realizar travesías bajo un sol ardiente, que normalmente se hacía en bote.

“Está seco, peor que el año pasado y este año se va a secar más”, señala Ramiro Costa, pescador.

“La mayor dificultad es el transporte. Queda lejos traer el producto, traer el alimento y el agua para t omar. Las personas ancianas no logran llegar al rio”.

• La selva amazónica, un ecosistema crucial para la regulación del clima, ha sido uno de los biomas más castigados por la sequía en Brasil. La ausencia de precipitaciones ha favorecido la propagación de incendios forestales en la Amazonia, que vive la peor ola de conflagraciones de las últimas dos décadas, según el observatorio europeo Copernicus.