Ocotlán, Jalisco
La sequía que azotó Jalisco durante la primera mitad del año, y que todavía se siente en la Región Ciénega donde las lluvias han sido esporádicas y que en varios municipios no se presentan desde septiembre del año anterior, sí ha causado afectaciones directas entre los agricultores, esto pese a que declaran, esta es una zona con abundante agua.
La comunidad del Raicero en Ocotlán es testigo de lo que pasa ante la falta de agua en la tierra, donde el trigo, el cual se acostumbra cultivar durante los meses secos, no dio los rendimientos esperados, así lo compartió Gabriel Salgado:
“Venimos, te puedo decir, de mal en peor. Yo te puedo decir que mi última cosecha, que la manejamos de alguna manera normal, el rendimiento fue de 6, 6.5 toneladas por hectárea de trigo, que fue hace cinco años. De ahí para acá venimos en decadencia, este año tuvimos un rendimiento de 3.5 toneladas por hectárea”.
Las razones por las que cree, hubo este bajo rendimiento, incluye las altas temperaturas, las cuales evaporan la humedad y no permiten que el trigo se desarrolle plenamente. Este año intentó un riego extra al habitual, pero tampoco funcionó. Por último optó por desazolvar uno de los canales de riego provenientes del lago de Chapala, ya que este tuvo un bajón en su nivel.
El ejido de San Luis del Agua Caliente en Poncitlán, es de los sobrevivientes a las altas temperaturas; sin embargo, Fernando Sánchez, agricultor de la zona, compartió que hubo otras problemáticas que mermaron sus ganancias:
“De las 1380 hectáreas que se sembraban de trigo, ya nomás se sembraron 309. Las otras 1080 ya se fueron a agave. En este año se va a ir más hectáreas a agave ¿Por qué? por lo que está pasando. Nuestro principal problema ahorita son los costos de producción, insumos muy caros, granos muy baratos”.
Tan sólo el año pasado, Fernando vendió la tonelada de trigo a 9 mil 300 pesos la tonelada. Ahora, el precio de la tonelada es de 5 mil 800. Casi cuatro mil pesos menos.
La esperanza de los agricultores de la Ciénega está en el temporal de lluvia. Desean que cubra cada rincón del campo. Aún así, también dicen estar preparados por si la lluvia dura poco como el año pasado. Jesús Estrada Orozco, detalló.
“Hicimos un cambio en el maíz, de sembrar maíz blanco, hicimos al cambio al maíz amarillo porque el ciclo es mas corto y en su momento nos estaban pagando mejor ese maíz. Fue una buena decisión por la retirada pronta del temporal, el maíz amarillo alcanzó a salir”.
Jesús Estrada dijo que en su zona han tenido temporales con abundante agua, de hasta 75 milímetros por metro cuadrado según sus propias mediciones, lo cual esperan se repita, ya que la pronta retirada de las lluvias el año pasado, les causó pérdidas de hasta 40% de sus cosechas.