España. 

Las futbolistas de la selección femenina de España aceptaron la convocatoria a jugar el viernes contra Suecia para que se den cambios estructurales en la institución.

Varias de las jugadoras fueron llamadas a competir pese a haber expresado que no querían ser convocadas.

Sin embargo, lograron un acuerdo con el Consejo Superior de Deportes (CSD) y la Federación Española de Fútbol para que se produjeran reformas en el organismo tras el escándalo del beso forzado del expresidente Luis Rubiales a Jenni Hermoso.  

"Nosotras veníamos reclamando que nos escucharan durante bastante tiempo porque estamos decantando, o sabíamos ya, que estaba viendo durante muchas décadas demasiadas una discriminación sistemática con el femenino".

Putellas negó que hayan solicitado la salida de la seleccionadora Montse Tomé, ayudante del destituido Jorge Vilda, a quien reemplazó en el cargo.

La Federación afirmó que Jenni Hermoso no fue llamada para protegerla de toda presión, mientras que señaló que no habría sanciones para las jugadoras que no quisieran seguir en la convocatoria.

 "Volvemos a repetir: lo único que queremos nosotras es jugar al fútbol en condiciones dignas y en las que se nos respete. Y ahora mismo, o hasta ahora, no ha sido del todo posible.

Después de lo que sucedió en la final, es totalmente imposible. Y por eso, lo que estamos intentando y demandando cambiar cosas para que en algún momento llegue ese punto en que las jugadoras solo se dediquen a jugar".

• Las deportistas admitieron que no están en las mejores condiciones para jugar el viernes contra Suecia en un partido de la Liga de Naciones, que otorga las plazas para los Juegos Olímpicos de París-2024.