Bogotá, Colombia.

Nueve deportistas se encuentran entre los 20 uniformados muertos por el atentado con coche bomba cometido el jueves en la escuela de cadetes en el sur de Bogotá, informaron hoy las autoridades colombianas.

Esos jóvenes, por su buen desempeño en deportes, lograron entrar en la Escuela de Cadetes de Policía General Francisco de Paula Santander.

Alfonso Mosquera, de 23 años, era distinguido lanzador de discos del departamento de Valle del Cauca (suroeste), quien ingresó a la institución armada con el fin de servirle a sus conciudadanos y sacar adelante a su humilde familia.

"Obtuvo en 2016 un tercer lugar en la categoría de mayores y en 2017, representando al Valle del Cauca, obtuvo el segundo lugar a nivel nacional, representó muy bien a esta región", afirmó Carlos Felipe López, gerente de Indervalle, entidad estatal que fomenta y apoya el deporte en ese departamento del país.

En esos hechos perdió también la vida Steven Prada, de 21 años, quien antes de ingresar a la Policía formó parte de un equipo aficionado de fútbol en la ciudad de Ibagué.

"Ver que un joven con tantos sueños, un joven con esa energía, con esa alegría, parta (muera) y nos deje de esa manera nos da mucho dolor", declaró Alirio Amaya, técnico de fútbol, quien dirigió a Prada en el club aficionado de Ibagué.

Allan Paul Bayona, de 22 años, era semifondista de 800 y 1.500 metros de atletismo, ingresó hace un año y medio a la Policía y era un destacado deportista del departamento de Tolima (centro-oeste).

"Cuando se llevan (muere) a un muchacho de éstos, se llevan lo mejor que tiene nuestro país", dijo Nelsón Barragán, entrenador de atletismo.

Otras de las víctimas fueron Jonathan Suescún y Juan Felipe Manjarrez, jugadores de voleibol del departamento de Meta (centro) que ingresaron en años anteriores a la Policía.

En tanto, otro de los uniformados muertos era Oscar Saavedra, quien practicaba el taekwondo a nivel departamental en Santander (noroeste).

"Era un muchacho muy noble, nunca tuve que reprenderlo porque hiciera algo malo, todo lo contrario era muy buen ser humano", señaló Henry Vargas, entrenador de taekwondo.

Cristian Camilo Maquilón, de 20 años, era también un atleta destacado, en tanto que otra de las víctimas fatales, Fernando Iriarte Agresot, de 19 años de edad, practicaba voleibol.

Otro de los estudiantes muertos identificados, César Ojeda Gómez, de 22 años, era aficionado al fútbol.

Las víctimas fatales son estudiantes de la escuela policial y uniformados que estaban persiguiendo a la camioneta que ingresó con los explosivos.

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