Recesión, ajuste y batalla contra el populismo marcan los primeros seis meses de Milei en Argentina
Recesión económica como fórmula para tratar de controlar la inflación y un severo ajuste del gasto público marcan los primeros seis meses del Gobierno del presidente de Argentina, Javier Milei, el mandatario liberal. (Xinhua/Martín Zabala)




 Buenos Aires.

Recesión económica como fórmula para tratar de controlar la inflación y un severo ajuste del gasto público marcan los primeros seis meses del Gobierno del presidente de Argentina, Javier Milei, el mandatario liberal que asumió el cargo el 10 de diciembre pasado y que ha llamado a dar una "batalla cultural" contra el populismo para que el país sea de aquí a los próximos 30 o 40 años una "potencia mundial".

   El diario "La Nación" explicó este domingo que a seis meses de su asunción, Milei "se acerca a un punto de inflexión.

La etapa que se iniciará mañana será crucial para el Presidente, no solo para medir la viabilidad de su plan, sino su capacidad para blindar la gobernabilidad y tomar las riendas de la gestión estatal".

   El periódico argentino fundado en 1870 recordó que Milei llegó a la Casa de Gobierno de Buenos Aires "en medio de una crisis inédita en materia económica e institucional. Con un estilo de liderazgo disruptivo y audaz, puso énfasis en bajar la inflación, desregular la economía y achicar el Estado".

   "La Nación" consideró que en ese plano, el mandatario argentino "logró su objetivo, con un saldo alentador para él: retuvo altos niveles de apoyo social, pese a que implementó un brutal ajuste. No obstante, Milei sufrió contratiempos, debido a la presión por los recortes, su mala praxis en la gestión y su impericia para sellar acuerdos".

   En tanto, el académico y politólogo Patricio Giusto explicó a Xinhua que la situación social en Argentina "en algunos sectores como la clase media y media baja es desesperante". 

"El consumo cae de una manera impresionante y si bien la inflación se desaceleró, los salarios se licuaron si hacemos una medición desde diciembre hasta ahora", señaló el también director de la firma de consultoría Diagnóstico Político, al agregar que se trata de "una situación realmente crítica".

   El país austral registró en abril pasado una inflación del 8,8 por ciento, el primer dato mensual de un dígito desde octubre pasado, con lo que acumuló 289,4 por ciento interanual, según informó el 14 de mayo pasado el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).

   La actividad económica a su vez cayó en marzo anterior un 8,4 por ciento interanual y acumuló una contracción del 5,3 por ciento en el primer trimestre, según los datos del INDEC.

   Milei ha dicho que las medidas adoptadas sirvieron para evitar una hiperinflación, además de que la economía muestra señales de mejoría.

   "Si no tomábamos medidas urgentes, la inflación podía llegar a niveles del 15.000 por ciento anual. En diciembre la inflación mayorista, que suele adelantarse a la inflación minorista, fue del 54 por ciento mensual", señaló recientemente Milei, para quien el país tiene ahora un horizonte que permite hablar de "créditos hipotecarios a 30 años", en lugar de centrarse en evitar una hiperinflación.

   Para el sociólogo Marcelo Rodríguez, la política oficial enfocada en atenuar la inflación se ha centrado en la recesión, lo que generó en forma paralela un incremento de las personas en situación de pobreza.

"Hay un enfriamiento total de la economía, una recesión muy fuerte, y la caída del consumo es muy grande. Los sectores más favorecidos siguen siendo el capital financiero y grupos empresarios vinculados al 'extractivismo', a la producción de alimentos y de energía, mientras que sectores de la industria la pasan muy mal porque se va dando una apertura de las importaciones", observó.

   En marzo pasado, la actividad económica cayó un 8,4 por ciento interanual y desde que asumió Milei la contracción acumuló hasta ese mes 5,3 por ciento, según datos del INDEC.

   El mandatario argentino señaló esta semana que "no solo está bajando la inflación", sino que también "empezó a rebotar la actividad económica".

"Bajamos la cantidad de ministerios a la mitad, eliminamos la obra pública, prácticamente eliminamos las transferencias discrecionales a provincias y encaramos un programa de racionalización del gasto social como nunca se vio", dijo el mandatario durante su visita a una muestra agropecuaria.

   La pobreza en Argentina alcanzó en el primer trimestre del año al 55 por ciento de la población, mientras que la indigencia fue del 17,5 por ciento, según un informe de la Iglesia Católica local.

   Esta situación social ha generado huelgas y movilizaciones impulsadas por sindicatos opositores y distintas organizaciones populares.

   Desde la visión de Giusto, "el ciudadano común por ahora está con paciencia, esperando, mientras que en la calle están los grupos que estuvieron en silencio entre 2019 y 2023, durante la Presidencia de Alberto Fernández (2019-2023)".

   La Confederación General del Trabajo (CGT) y la Central de los Trabajadores Argentinos (CTA), entidades que agrupan a los principales gremios y sindicatos del país, convocaron a una movilización frente al Congreso para el próximo 12 de junio, cuando el Senado podría aprobar la "Ley Bases", un proyecto clave para el Gobierno por la batería de reformas políticas, económicas y sociales que incluye.

   El dirigente del gremio de camioneros, Pablo Moyano, uno de los tres integrantes de la conducción colegiada de la CGT, adelantó en conferencia de prensa que se concentrarán en la Plaza del Congreso en Buenos Aires para decirle a los senadores que todavía dudan en sus votos, "que piensen que tienen una responsabilidad histórica: O se convierten en héroes de la Patria o en traidores". 

  •    El extenso debate en el Congreso de un proyecto ley que con idas y vueltas comenzó a tratarse en enero pasado, muestra que "con su apuesta al antagonismo, un sello indeleble de su ascenso político, y su tendencia a tensar la cuerda", Milei no consigue aumentar su sostén Legislativo o blindar acuerdos, pese a que cuenta con un sector opositor dispuesto a acompañar sus reformas y dar vuelta la página del modelo kirchnerista, que gobernó el país entre 2003-2015 y 2019-2023.

   Milei no ha conseguido la aprobación de leyes en el Legislativo desde su asunción al poder, pero en cambio firmó 25 Decretos de Necesidad y Urgencia, además de calificar a legisladores de la oposición como "traidores" que rechazan perder "privilegios".

   Para el académico Giusto, el Gobierno "ha fracasado en construir mínimos consensos con sectores con los que podía haberlos".

   El analista advirtió que "no habrá gobernabilidad sustentable sin que el Congreso pueda aprobar y acompañar iniciativas fundamentales, sobre todo en lo fiscal, donde el presidente tiene prohibido por la Constitución emitir decretos".

   Recientemente, legisladores de la oposición acordaron modificar la forma en que se calculan las jubilaciones, un cambio que según ha estimado la prensa local tendría un impacto de 2.000 millones de dólares en las arcas públicas.

   Milei ha advertido al respecto que vetará las iniciativas de la oposición en el Congreso que atenten contra el equilibrio fiscal.

"No voy a entregar el déficit cero de ninguna manera. Si aun así buscaran el mecanismo para seguir rompiendo el equilibrio fiscal, voy a bajar más el gasto público hasta que le duela más a la política", expresó el mandatario.

   "Tenemos pendientes después de esto 3.200 reformas estructurales más", dijo el presidente, al sostener que estas permitirán que Argentina se convierta en un lapso de 30 o 40 años "en el país más próspero del mundo".