Moscú, Rusia.
Los rusos votaban este domingo en unas presidenciales que previsiblemente darán la victoria a Vladimir Putin, mientras la oposición denunciaba fraudes destinados a legitimar los comicios, en momentos de fuerte tensión con Occidente tras el envenenamiento de un exespía ruso en Reino Unido.
La expulsión recíproca de diplomáticos rusos y británicos reforzó al final de la campaña el clima de Guerra Fría que se instaló durante el último mandato de Putin, quien si gana, como se espera, seguirá a la cabeza del país hasta 2024.
Más de 107 millones de electores están llamados a las urnas en el país más grande del mundo y con 11 husos horarios. La votación se inició a las 08H00 locales (20H00 GMT del sábado) en el punto más oriental del país y a las 06H00 GMT del domingo abrieron los colegios electorales en Moscú. Cerrarán en Kaliningrado, el enclave más occidental, a las 18H00 GMT.
Putin suma, según los últimos sondeos, el 70% de intención de voto. Su principal opositor, Alexéi Navalni, fue inhabilitado para presentarse.
Sin opositor de peso, el barómetro de esta elección será la tasa de participación. La organización no gubernamental Golos, especializada en la vigilancia de elecciones, denunció que hasta las 11H00 GMT se registraron 1.839 casos de irregularidades como rellenado de urnas, votos múltiples o trabas a los observadores.
Según la Comisión Electoral, la participación global a las 11H00 GMT era de 34,72%, más que en los comicios de 2012 a la misma hora.
La agencia pública TASS dio cuenta de una participación en varias regiones del extremo oriente ruso superior al 60%, e incluso el 70%, en donde los colegios electorales ya cerraron.
Las autoridades hicieron una campaña masiva de información e incitación al voto, facilitando el voto fuera de las circunscripciones de residencia pero también, según la prensa, presionando a funcionarios o estudiantes para que voten.
Según militantes de la oposición, la policía trasladó electores en autobús hacia los colegios electorales y se distribuyeron cupones de reducción entre los electores.
- Estabilidad -
El gran ausente en la elección presidencial es el principal opositor al Kremlin, Navalni, el único que logra movilizar a decenas de miles de personas pero a quien se le prohibió presentarse por una condena judicial, que él considera orquestada por el poder.
Navalni llamó a boicotear los comicios y envió a más de 33.000 observadores a los colegios electorales que reportaron centenares de casos de fraude, principalmente en Moscú.
La candidata de la oposición Xenia Sobchak llamó por su parte a los electores a que ejerzan su voto. "Mientras más importante sea la victoria de Putin, más duro será su sistema", dijo.
Putin, de 65 años, de los cuales 18 en el poder, es elogiado por haber devuelto la estabilidad al país tras la caótica década de 1990, aunque según sus detractores a costa de las libertades individuales.
"Los últimos cuatro años tuvimos las sanciones (occidentales), pero también construimos mucho, nuevas fábricas abrieron, la inflación es baja", explicó a la AFP Olga Matiunina, una electora de Putin, de 65 años.
"Todo el mundo sabe que será elegido. Ya no da ganas (ir a votar) y tenemos la sensación de que nada depende de nosotros", indicó por su lado Boris, de 39 años, entrevistado en San Petersburgo.
El actor francés Gérard Depardieu, nacionalizado ruso en 2013, votó en la embajada rusa de París, según una foto difundida por la cuenta Twitter de la embajada.
Tras votar en Moscú, Putin aseguró que quedará satisfecho con cualquier resultado si le permite "ejercer la función de presidente".
Su principal adversario, el candidato del Partido Comunista Pável Grudinin obtendría el 7% de los votos, según el instituto VTSIOM, y el tercero en liza, el ultranacionalista Vladimir Zhirinovski, alrededor del 5%. Los otros cinco candidatos conseguirán un resultado marginal, según la misma fuente.
- Voto bloqueado en Ucrania -
La última semana de campaña estuvo marcada por un nuevo pico de tensión entre Moscú y Occidente debido al envenenamiento en Inglaterra del ex agente doble Serguéi Skripal y su hija.
Moscú anunció el sábado la expulsión de 23 diplomáticos británicos en represalia por una medida similar adoptada por Londres.
Esta elección se celebra simbólicamente cuatro años después de la ratificación de la anexión de la península de Crimea a Rusia, decidida al término de un referéndum considerado ilegal por Kiev y por las potencias occidentales.
Kiev bloqueó el voto de electores rusos establecidos en Ucrania. Decenas de policías y militantes nacionalistas bloqueaban el domingo el acceso a los consulados rusos en varias ciudades.