Posadas, festejos navideños llenos de tradición




Por Tatiana Sánchez

Historia de las posadas

Las posadas consisten en reuniones que realizan las personas católicas durante el mes de diciembre, en las que se llevan a cabo rezos y cantos que relatan el transitar de  María y José para llegar a Belén, lugar donde nacería el Mesías. Mario Gómez Mata,  jefe del Archivo Histórico municipal y cronista laguense, nos habla al respecto:

“Es una de las más bellas tradiciones que llegaron junto con la evangelización en el siglo XVI, aquí en la zona Centro-Occidente de México, traída como todos saben por los españoles, por los primeros frailes evangelizadores, en este caso fueron los frailes Agustinos que pidieron permiso al papa Justo V para la celebración de inicio de Navidad, que luego se convirtieron en posadas”.

Esta tradición tuvo su origen en  la época colonial, actualmente se realizan del 16 al 24 de diciembre, día en que se celebran los acostamientos del niño Jesús en casas particulares, iglesias y hasta en las calles de los diferentes barrios y colonias.

“Son del 16 al 24 de diciembre, que según la tradición cristiana pues fue cuando nació Jesucristo en Belén y que lo recuerdan con la travesía que hizo de Jerusalén a Belén la Virgen María y el Señor San José para el nacimiento de Jesús allá en Belén y poder entrar al censo avalado por el emperador Cesar Augusto, es una tradición que se ha conmemorado desde tiempos coloniales”.

Organización y realización

La organización de las posadas varía dependiendo del lugar en el que se realice, en la actualidad se llevan a cabo distintas versiones, están las posadas organizadas por las empresas, escuelas, e instituciones públicas, en las cuales no hay rezos y el ambiente es más relajado.

Pero también existen las tradicionales, mismas que se organizan de manera particular o vecinal dependiendo de la cantidad de personas que participen. En ellas, luego de rezar y cantar se ofrece comida como tamales, pozole, ponche, aguinaldos o molotes, y en algunas se quiebran piñatas.

“Son tradiciones traídas por los españoles, se hace muy bonito ambiente en Navidad, es uno de los eventos más esperados por los niños, sobre todo por los molotes que reciben, los dulces, cacahuates, las cañas, naranjas, todo lo que se regala en los famosos molotes, y las piñatas que se quiebran que también fue una forma de evangelizar, de prevenir contra los siete pecados capitales”.

De acuerdo con Gómez Mata, debido al alza en los precios y los malos pagos que tienen los trabajadores, cada vez es más difícil que se organicen posadas de manera independiente. Es por eso que las personas se organizan en grupos intentando seguir con las tradiciones que disfrutan tanto los niños. De igual manera, pese a la inseguridad por la que pasa el municipio, el cronista opina que las posadas seguirán realizándose pues son precisamente las tradiciones las que pueden hacer que las personas mantengan los valores de convivencia y unión.