Por Coronavirus, una pareja de tapatíos atrapada en un crucero en Oceanía
Fotografía: Cortesía




Guadalajara, Jalisco.

Lo que comenzó como un viaje de ensueño, se convirtió en pesadilla para una pareja de tapatíos que ganó un viaje en un crucero. El navío sigue de puerto en puerto por la emergencia del Coronavirus (COVID-2019) sin poder desembarcar.

Se trata de Rubén Chávez Shelly y su esposa Maru, ambos de Guadalajara. Él ganó el viaje en Crucero como un premio por ser el mejor vendedor de una firma de seguros en Guadalajara. Pero ya tienen 18 días en su calvario.

El crucero Norwegian Jewel saldría desde Sidney, Australia, hasta Bora Bora en la Polinesia Francesa. Cuando abordaron, no había sido declarada aún la pandemia.

"Iniciamos nuestro viaje en Sidney el 28 de febrero. Comenzó a modificarse el itinerario pues cerraron los puertos de Bonato y de Pago Pago. Nos dirigimos a Nueva Caledonia, a Fiji y a la Polinesia Francesa. Íbamos a medio camino luego de tres días en altamar y se canceló".

El reportero pudo comunicarse muy brevemente con el señor Ruben Chávez Shelly quien envió un audio de whatsapp, con muchos trabajos, pues les han restringido el servicio de internet inalámbrico.

Relató que luego de varios periplos, el crucero tuvo que volver a Nueva Zelanda, pero allá también cerraron el puerto por lo cual regresaron a Fiji.

"Y ya estando cerca de Fiji nos iban a cerrar el puerto. En ambas ciudades habíamos comprado boletos de avión que tuvimos que cancelar con muchos trabajos, a ver si nos devuelven el dinero. De Fiji fuimos a Pago Pago a cargar combustible. No podemos bajar, estamos anclados cargando gasolina desde hace cinco horas y supuestamente nos iremos a Hawai para llegar el 22 de marzo".

Luego de ser rechazados en cinco puertos, la desesperación se asoma en esta pareja.

"Entonces ha sido una incertidumbre y una frustración. La naviera dice que nos va a devolver el 100 por ciento del costo, vamos a ver si es cierto. Por el momento estamos cargando gasolina en Pago Pago, hoy es 17 de marzo y saldremos mañana a las 6 de la mañana. Hoy es la 1 de la mañana del 17 de marzo".

El contacto con el mundo exterior es intermitente porque en el barco solo les abren el internet cuando están en un puerto, lo cual les parece injusto a los pasajeros.

Han intentado comunicarse con la Secretaría de Relaciones Exteriores, vía telefónica, sin éxito. Parientes de esta pareja también han intentado hacerlo y han enviado correos electrónicos, pero señalan que no les han escuchado.

Ahora lo que piden es que a su llegada a Hawaii se les permita tomar un avión para regresar a su hogar.