París dedica una retrospectiva a Tina Modotti, fotógrafa del México posrevolucionario
El pasado obrero de la fotógrafa italiana Tina Modotti afinó sin duda su singular mirada sobre los pobres de México en los años veinte y nutrió una obra revolucionaria que se expone a partir de este martes en el museo Jeu de Paume de París. Foto original de @miqueliceta- X




París, Francia.

El pasado obrero de la fotógrafa italiana Tina Modotti afinó sin duda su singular mirada sobre los pobres de México en los años veinte y nutrió una obra revolucionaria que se expone a partir de este martes en el museo Jeu de Paume de París.

La muestra de 240 fotografías en blanco y negro, programada hasta mayo, recorre cinco etapas de la vida de esta artista nacida en una modesta familia en Udine, en el noreste de Italia, en 1896.

Tina Modotti emigró en 1913 a la costa oeste de Estados Unidos, donde trabajo en una fábrica textil.

  • Después ejerció de modelo y actriz de cine y teatro antes de convertirse en pareja del fotógrafo Edward Weston.

"Posa para él a partir de 1920, antes de convencerlo de viajar al México posrevolucionario y quedarse cierto tiempo", explica la comisaria de la exposición, Isabel Tejeda Martín.

Weston "le regalará su primera cámara a cambio de su trabajo en su estudio de fotografía y en casa" antes de volver solo a Estados Unidos a finales de 1926.

Bajo el título "El ojo de la Revolución" y promovida con un cartel de su célebre instantánea "Mujer con bandera" (1927), la exposición "pretende mostrar sus fotografías una junto a otra, revelando la gran modernidad de Modotti" ya sea en bodegones, imágenes de arquitectura o retratos, dice la comisaria.

"Renacimiento artístico" de México

Durante sus años en México, explica, la artista "vive lo que llamamos el 'Renacimiento' artístico y cultural del país y se convierte en una figura indispensable que transformará la fotografía".

"Aportará una mirada llena de empatía, que cambiará la fotografía denunciando de una forma muy personal las injusticias sociales" con escenas callejeras, de manifestaciones o de los campesinos sin tierra, cuenta Tejeda Martín.

Tina Modotti documenta también el trabajo de artistas como José Clemente Orozco o Diego Rivera, con cuya mujer Frida Kahlo entabló amistad.

Cada vez más comprometida políticamente, las imágenes de Modotti aparecieron durante su vida en numerosas publicaciones comunistas en Estados Unidos, en Europa, en Alemania y en la Unión Soviética.

Tras su adhesión al Partido Comunista en 1927, se integrará al Socorro Rojo Internacional (el equivalente comunista de Cruz Roja) y colaborará con el periódico "El Machete", dirigido a las poblaciones campesinas que lo leen enganchado a las paredes porque no pueden comprarlo.

Alegoría y simbolismo 

Aunque usó en ocasiones el fotomontaje, declaró en un manifiesto que no busca "producir arte, sino fotografías honestas sin recurrir a trucos o artificios".

Su estilo, que marcará a homólogos mexicanos como Manuel Álvarez o Graciela Iturbide, evoluciona hacia "la alegoría, como cuando intenta demostrar el conjunto del mundo campesino con gente con sombreros fotografiadas desde arriba, como si fuera un mar, y el simbolismo, con fotografías de mazorcas, cartucheras y guitarras junto a la hoz y el martillo", explica la comisaria.

En 1930, Modotti es expulsada de México después de ser acusada equivocadamente de haber participado en un atentado contra el presidente Pascual Ortiz Rubio, pero pudo regresar al país donde murió en 1942.

Pasó brevemente por Berlín y después fue a la Unión Soviética, donde el Partido Comunista decidió enviarla a la España republicana.

En medio de la guerra civil española, participó en 1937 en el II Congreso Internacional de Escritores para la Defensa de la Cultura en Madrid Valencia y Barcelona junto a Octavio Paz, Ernest Hemingway, Robert Capa, Alexéi Tolstói, André Malraux o Anna Seghers.