Nuevo gobierno mexicano no permitirá extracción de petróleo o gas por fractura hidráulica, dice López Obrador




Ciudad de México, México.

El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, descartó este viernes que en su gobierno, que iniciará el próximo 1 de diciembre, utilicen el método de fractura hidráulica, mejor conocida como "fracking" para la exploración y extracción de gas y petróleo.

"Les adelanto que no vamos a utilizar el famoso fracking para explotar petróleo, no vamos a usar esos métodos de extracción de petróleo, de gas", afirmó el futuro presidente de México.

López Obrador, quien gobernará a México durante los próximos seis años, descartó la posibilidad de realizar ese método en los bloques terrestres que el actual gobierno licita en la cuenca de Burgos y en la provincia de Tampico-Misantla, situadas en los estados de Coahuila, Nuevo León, Tamaulipas, San Luís Potosí, Hidalgo, Veracruz y Puebla.

"Eso no se va aplicar aquí en San Luis Potosí y en todo el país. No vamos a utilizar ese método para extraer petróleo y para extraer gas", insistió en rueda de prensa ofrecida en el marco de una gira por el central estado de San Luis Potosí .

López Obrador presentó a finales de julio pasado su plan para rescatar al sector energético de México, al no estar convencido de la reforma energética que abrió el sector a inversionistas privados.

Entre sus planes del nuevo gobierno es impulsar un primer programa que contempla invertir 75 mil millones de pesos para perforar nuevos pozos petroleros, así como también elevar la producción en dos años de los 1,9 millones de barriles diarios que se extraen en la actualidad a los 2,5 millones.

También pretende rehabilitar seis refinerías que hay en México, con el fin de que en dos años operen al 100% de su capacidad y evitar así tener que comprar gasolina en el exterior.

La estrategia de López Obrador es para impulsar el sector y mejorar la situación ante la difícil situación que vive Petróleos Mexicanos (Pemex) en materia productiva.

La extracción de crudo ha caído a 1,9 millones de barriles diarios, niveles mínimos en 17 años, según reportes de la empresa productiva del Estado mexicano.