Monterrey, Nuevo León.
De Marie Curie, pionera de las mujeres en la ciencia a la actualidad, las féminas han recorrido un largo camino en este campo y han ido conquistando espacios, y lo mismo se reproduce también en México.
Marion Emilie Genevieve, doctora en Inmunología y Biología de Sistemas, así como investigadora en el Centro de Biotecnología-FEMSA, del Tecnológico de Monterrey, y la estudiante de Ingeniería Química de esa misma institución, Celine Rojas Schröter, compartieron sus experiencias como “mujeres de ciencia”.
Genevieve relató que el detonante para acercarse a la especialidad de Inmunología y Biología de Sistemas fue un episodio familiar cuando su madre fue diagnosticada con cáncer y tras el tratamiento con quimioterapia su organismo quedó muy debilitado.
Al ver la condición de su progenitora pensó que podría hacerse algo para mejorar la condición de ese tipo de pacientes.
“Cuando mi mamá se enfermó le dieron quimioterapia y eso le curó el cáncer, pero también le bajó los niveles de células inmunes que se llaman neutrófilos y tuvo una episodio de una infección”, recordó.
Mencionó que desde entonces lo que ha hecho durante su doctorado y que sigue realizando como investigadora en el Centro de Biotecnología-FEMSA es producir neutrófilos, lo cual forma parte de un ambicioso proyecto “porque la transfusión de neutrófilos es algo que no existe”.
“Transfundimos sangre, plasma y así, pero la transfusión de neutrófilos no existe. Hay muchas barreras que estamos rompiendo poco a poquito. Producimos neutrófilos humanos a partir de células de cordón umbilical y los producimos a gran escala para poder en el futuro tener, ojalá, una terapia celular”, detalló.
Indicó que la idea es que en algún momento este avance científico pueda servir para los pacientes con tratamientos contra el cáncer u otras condiciones que afecten el sistema inmune.