Ciudad de México, México.
La detección de más de 10.000 tomas clandestinas de combustible en 2017 por parte de Petróleos Mexicanos (Pemex), una cifra récord, no se debe a un crecimiento del fenómeno, sino a un mayor control, aseguró hoy el Gobierno federal.
"Pemex tiene una detección de tomas clandestinas mucho mejor. (...) La nueva estrategia la vamos a profundizar, no la vamos a cambiar, inició el año pasado y es una nueva estrategia de combate al robo de combustible", afirmó en rueda de prensa el vocero de la Presidencia, Eduardo Sánchez.
Explicó que se logró una mayor coordinación "entre dependencias del Gobierno federal", y así, Pemex trabaja hoy de la mano para cruzar "información de inteligencia financiera y de compras de combustibles" por parte de estaciones de servicios, para identificar dónde hay robos.
Además, dijo, se cuenta con el apoyo de autoridades estatales.
"Los resultados son que estamos detectando más tomas clandestinas y se pueden clausurar más rápidamente. Ha crecido el volumen de combustible decomisado a los huachicoleros (ladrones de combustible) y se ha incrementado el número de personas que han sido vinculadas a proceso penales por robo de gasolina", indicó Sánchez.
En esta nueva estrategia, también se persigue a las gasolineras que ofrecen combustible robado, lo que llevó al cierre de 70 estaciones de servicios en medio año.
"Estamos frente a un delito que se enquistó mucho socialmente, con muchas ramificaciones, pero creo que estamos en la ruta correcta para irlo combatiendo y reduciendo", agregó.
Tomas clandestinas de combustible aumentaron un 51 % en México durante 2017
Pemex reportó 10.363 tomas clandestinas de combustible durante 2017, un 51 % más respecto de las 6.873 detectadas un año antes y una cifra récord.
Por estados, Guanajuato (centro) se convirtió en la región donde se descubrieron más puntos de ordeña de combustible, con 1.852, el 18 % del total nacional.
Le siguen Puebla (centro), con 1.443 de los llamados piquetes a ductos; Tamaulipas (noreste), con 1.100 tomas clandestinas, Hidalgo (centro), con 1.064, y Veracruz (este), con 1.012.
El robo de combustible en México genera pérdidas de entre 15.000 y 20.000 millones de pesos anuales (entre 800 millones de dólares y 1.070 millones de dólares), y en el delito pueden estar involucrados trabajadores de Pemex, según datos oficiales.