Merkel recibe a Putin con Siria, Ucrania y Trump en el punto de mira




Berlín, Alemania.

La canciller alemana, Angela Merkel, recibirá este sábado cerca de Berlín al presidente ruso, Vladimir Putin, para abordar los conflictos de Siria y Ucrania, en un momento en el que las continuas salidas de tono del presidente estadounidense, Donald Trump, generan incertidumbre en el tablero político global.

Por segunda vez en tres meses, los dos mandatarios mantendrán un encuentro bilateral, en esta ocasión en el Palacio de Meseberg, unos 60 kilómetros al norte de la capital alemana.

Durante la reunión se espera que ambos dirigentes intenten acercar posturas en relación con el futuro de Siria, donde continúan situándose en posiciones diametralmente opuestas.

Putin, principal aliado del Gobierno del presidente sirio, Bashar al Assad, pretende iniciar la reconstrucción de un país asolado por más de siete años de guerra civil. No obstante, para ello necesita que una Unión Europea (UE) muy crítica con el régimen de Assad relaje sus sanciones económicas y se una a las ayudas financieras.

Merkel, al igual que el resto de sus socios del bloque comunitario, insiste por el momento en que lo prioritario es que el conflicto en Siria se resuelva por la vía política y, a poder ser, que culmine con la renuncia de Al Assad, algo que parece que no va a suceder.

A lo largo del encuentro, la canciller alemana y su homólogo ruso también se esforzarán por avanzar en una solución de paz en Ucrania, una crisis que tensó las relaciones entre Berlín y Moscú después de que Rusia se anexionara la península de Crimea en marzo de 2014.

Sobre la mesa figura también el acuerdo para el gasoducto Nordstream 2, que conectará Rusia con Alemania y Europa Central y del Este a través de 1.200 kilómetros por el mar Báltico. Este proyecto ha sido fuertemente criticado por Trump, quien entiende que servirá para hacer a Europa energéticamente muy dependiente de Rusia.

Atrás quedaron los tiempos en los que ambos mandatarios apenas se veían frente a frente. La anexión de Crimea enfrió el contacto personal entre los dirigentes. A pesar de que siguieron hablando por teléfono, Merkel tan solo visitó Rusia en dos ocasiones en los últimos cuatro años.

Pero desde el mes de marzo, cuando Merkel inició su cuarto mandato consecutivo y Putin fue reelegido presidente, los dos líderes han propiciado el acercamiento con hasta tres encuentros importantes.

Merkel y Putin se reunieron a mediados de mayo en el balneario ruso de Sochi, en el mar Negro. Posteriormente, Merkel recibió al ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, y al jefe de Gabinete, Valery Gerassimov, en Berlín, a finales de julio. La guinda la pondrá este sábado Putin, cuando visitará Alemania por primera vez desde que comenzó la crisis de Ucrania.

La canciller alemana y el presidente ruso se conocen desde 2005, año en que Merkel asumió la jefatura del Gobierno alemán. Desde entonces, su relación se describe a menudo como fría pero los dos dirigentes se tienen tomada la medida.