Por Juan Antonio Orozco

Desde el inicio de la FIL se había corrido el rumor de que las feministas se manifestarían y la expectativa estaba puesta en la reproducción del performance “Un violador en tu camino” coreografía del colectivo Lastesis originado en Chile y que ha dado la vuelta al mundo demostrando que la violencia hacia las mujeres no es una problemática exclusiva de países o regiones. La convocatoria se corrió a través de redes sociales y grupos de Whatsapp. El viernes 6 de diciembre se llegó el día, y aunque la invitación originalmente era para reunirse en la explanada de la entrada principal de la Expo, finalmente tomaron la decisión de manifestarse al interior del recinto.

Un grupo de cerca de 200 mujeres acudió al pasillo del área internacional desde donde interrumpieron el barullo flotante en la FIL al grito de “el violador eres tú”. Con pañuelos verdes y morados, vendas negras en los ojos y algunas de ellas acompañados por sus hijos e hijas entonaron la ahora universal protesta contra la violencia machista añadiendo algunas consignas que aludieron a la situación actual del tema en distintos centros educativos del país y la omisión de las instancias de gobierno.

“En los reportes a las mujeres se les revictimiza una, dos, tres, cuatro veces. Somos estudiantes de derecho y sabemos de viva voz lo que cuesta acompañar a una mujer que ha pasado por una violación y que pase por un psicólogo y que pase por otro, y que esté reviviendo lo que pasó veinte veces hasta que desiste porque no le hacen válida su denuncia.” 

“En mi escuela han intentado miles de veces llevarse a chavas, literal, a una cuadra de la escuela. Hemos ido marchando hasta Palacio Municipal y nos ponen más vigilancia, más luz y lo que quieras quince días y después desaparece esa ayuda.”

 La formación dispuesta para la coreografía se rompió al terminar para comenzar a marchar por los pasillos del lugar enarbolando pancartas en las que podía leerse “No soy histérica ni estoy menstruando, grito porque nos están matando”, “Prefiero que se queme todo hoy y que mañana tú no vivas con miedo” y “Ni una abeja menos”. Al grupo se le fueron sumando cada vez más asistentes y algunas mujeres pertenecientes al Staff de FIL hasta convertirse en una marea verde que serpenteaba por los pasillos del área nacional de la feria.

 Solidarizándose con la Universidad de Guanajuato, que en ese momento se encontraba en paro tras extender un pliego petitorio en el que, entre otras cosas se exigía que las autoridades garanticen el alto a los casos de acoso sexual de parte de personal académico y administrativo para con la comunidad estudiantil. El contingente se detuvo frente al stand de la UG, donde entonaron al unísono un “No están solas”. Pancartas y consignas también manifestaron ese apoyo en las que se leía “Fuerza UG” y “Ni una abeja menos”.

Ante la mirada atónita de algunos y reprobatoria de otros, el grupo continuó su marcha por el lugar y antes de abandonar el recinto, se hizo oír con una pañolada feminista en el vestíbulo.

Finalmente, las manifestantes se reunieron en el exterior del edificio formando un círculo en el que se quemaron unos pocos ejemplares de “Psico-Terapia pastoral” de Juan Manuel Rodríguez y Misael Ramírez, libro en el que dijeron, se promueven las terapias de conversión y está en contra de la diversidad de género. Nuevamente volvieron a invocarse “Un violador en tu camino” y algunas de las consignas manifestadas al interior.