Wiesbaden, Alemania.

Los hogares alemanes produjeron en 2017 un récord de basura orgánica, según datos publicados hoy por la Oficina Federal de Estadísticas.

En total, los alemanes se deshicieron de 10,3 millones de toneladas de restos orgánicos, lo que equivale a una media de 125 kilogramos por persona. Esta es la cifra más alta desde 2004, año en el que se comenzó a confeccionar esta estadística.

Uno de los principales factores que contribuyó a la plusmarca es la propagación del contenedor de basura biológica en las urbes germanas. Estos contenedores son vaciados regularmente.

En ellos se pueden verter desperdicios de origen orgánico como restos de verdura y fruta, huesos, comida cocida, queso, lácteos, té, café y desechos de plantas del jardín.

En total, los hogares alemanes produjeron 38,3 toneladas de basura, 0,2 millones de toneladas más que en 2016 y una media de 462 kilogramos de desecho por persona.