Querétaro, México.
Una mujer que pasó en prisión tres años y cuatro meses acusada de homicidio por parto fortuito, fue absuelta y recuperó su libertad en San Juan del Río, en Querétaro.
Dafne McPherson, de 28 años, presentó un parto espontáneo en el baño de una tienda departamental el 17 de febrero de 2015 en el que murió su bebé por lo que fue acusada de homicidio calificado y sentenciada a 16 años de prisión.
"Lo único que puedo decirle a otras mujeres que están en mi situación es que nunca pierdan la esperanza", dijo McPherson al dejar la prisión.
"Voy a empezar de cero, volver a hacerme cargo de mi hija y todo como antes", añadió.
Para demostrar la inocencia de McPherson, el Grupo de Acción por los Derechos Humanos y la Justicia Social, presentó análisis para demostrar que la muerte de la recién nacida fue por un alumbramiento en un sitio inadecuado y por la falta de atención médica.
Señalaron que un año antes del parto, a McPherson se le diagnosticó con hipotiroidismo, una enfermedad que le ocasiono un aumento de peso, menstruación irregular y fatiga, síntomas no le permitieron distinguir los signos que pueden presentarse en un embarazo.
Sus defensores adelantaron que presentarán demandas al considerar que la Fiscalía no actuó con una perspectiva de género y la Fiscalía de Querétaro anticipó que revisara la resolución del juez para determinar si apela el fallo.
"La Fiscalía informa que una vez que tenga la resolución por escrito respecto del fallo dictado por un Juez, sobre la acusación por el homicidio de una menor recién nacida, en el municipio de San Juan del Río, revisará los argumentos", apuntó
Actualmente, el código penal federal mexicano impone una pena de uno a cinco años de prisión a las mujeres que se sometan a un aborto o se lo provoquen, así como condenas que pueden ir de uno a ocho años de prisión a quienes lo realicen, incluyendo médicos.
La condena a las mujeres disminuye de seis meses a un año de prisión si concurren tres circunstancias: que "no tenga mala fama", que "haya logrado ocultar su embarazo" y que este sea "fruto de una relación ilegítima".
Las excepciones para que no haya castigo son dos: que la vida de la mujer corra peligro o que el embarazo haya sido fruto de una violación.