Familiares de dos detenidos por la Fiscalía relatan los excesos policiacos durante las detenciones arbitrarias
Fotografía: Cortesía




Guadalajara, Jalisco.

Ella iba con su pareja bajando del Tren Ligero, en la estación Juárez. Eran las 19:45 del jueves pasado. Su novio había pasado por ella a su trabajo para regresar juntos a casa. Él es licenciado en gastronomía y María –nombre ficticio- labora por el centro de la ciudad.

Ambos se quedaron viendo cuando decenas de policías estatales perseguían a manifestantes para detenerlos. Los jóvenes huían. De pronto, a ella un policía la amenazó con detenerla, pero a quien aprehendieron fue a su novio.

María estaba en la calle 14, el sábado, cuando relató el abuso policiaco que sufrió su pareja y pedía información clara de qué se le acusaba y exigía que fuera puesto en libertad, al tratarse de una detención arbitraria.

"Al verlos, todos los manifestantes corren. Yo no corrí, estaba en la esquina (de Juárez y Federalismo). Yo no corrí porque no estaba haciendo absolutamente nada. Creo yo que ese fue el error el no haber ocrrido, porque un policía me amenazó y me tomó a la fuerza. Al ver esto, mi pareja obviamente fue a ayudarme, a defenderme, a decirle que nosotros estábamos en son de paz, que nosotros no nos queríamos manifestar, pero a él lo amenazaron, lo golpearon, lo agredieron física y verbalmente. A él lo sometieron entre varios policías, lo golpearon con tablas y piedras”, relató.

María le pidió a los testigos que grabaran la detención arbitraria en contra de su novio y obtuvo algunas de esas imágenes, donde se observa cómo lo subieron a una patrulla, sin número.

La patrulla no tenía ni número, ni nada. Lo suben a él. Me dicen que lo llevarían a la calle 14, vengo aquí y no me dan informes. esa fue nuestra primera preocupación, porque no aparecía en ningún lado. Ni en la Fiscalía, ni en ningún lado. Hasta las 4 de la mañana (del viernes 5) supimos en donde estaba realmente. Ya al estar aquí, el día de hoy, nos informan que él fue ingresado a la Penal y no nos dan información de nada. Es por eso que hacemos esta inconformidad”, expresó.

María señaló que a su novio lo detuvieron por su aspecto. Tiene un piercing y una extensión en una oreja.

Afuera de la calle 14 también estaban, Mayela y Abraham, tíos de Diego de 17 años de edad, quien fue golpeado salvajemente durante su detención tras la primera manifestación del jueves. Ambos reclamaron la nula información que le daban a los familiares de los 28 detenidos.

“La información ha sido muy poca, a pesar de que son menores de edad. No nos dan información certera. Estamos investigando por otro lados, porque aquí (en las oficinas de la Fiscalía de la calle 14) nos dicen que no saben. Apenas por medio de otros papás nos estamos enterando que ya están en la Penal. Vamos para allá, pero aquí de parte de la Fiscalía, no nos avisaron nada”, afirmó.

Abraham, tío de Diego, se quejó de los excesos de los policías, durante la detención del menor de edad.

“Ay, pues no sé qué decir a eso, pero quien entró a verlo no lo vio bien. ¿Qué le pedimos al gobernador?, ¿al fiscal?. Que la información sea clara y que el proceso sea claro y justo”, señaló.

Los familiares permanecieron en la banqueta de la calle 14, hasta que fueron liberados los 28 detenidos, tras la orden dada el sábado por el gobernador Enrique Alfaro.


Ignacio Pérez Vega