Por Paúl Martínez Facio

Ayer, jueves 22 de febrero, Vanesa Salazar Enríquez ofreció la charla Platicando con Emprendedores, dirigida a los estudiantes del CULagos. La empresaria relató que su proyecto comenzó como un puesto de tianguis, para luego transformarse en una tienda de ropa y, en la actualidad, una marca que desarrolla sus propios productos especializados.  Al respecto de las dificultades que tuvo que afrontar, relató lo siguiente:

«Antes de esto, me ha tocado batallar bastante por el lado de que hacer un tenis, o hacer un calzado en aquellos entonces no era tan fácil, porque es gente empresaria grande, y para empezar, o más bien una de las cosas fuertes, son hombres. Entonces imagínese, yo a mis 20 años ya tenía esta idea, ya había logrado un poquito de hacer dinero, con lo de la tienda, ya me sentía como capaz, o con ganas de hacer las cosas».

Parte del proceso fue adentrarse en lo que no conocía, pues para llegar a transformar una idea en producto concreto, es preciso acercarse a nuevas situaciones. Sobre su experiencia con el calzado:

«Yo me metí de lleno hasta las fábricas, llegué a ver cómo se llama este material, para qué sirve está máquina, de ver cómo se hacía la gamuza, de ver cómo se hacían ciertos materiales. Yo creo que eso ha sido una de las cosas que más me han gustado también, porque me apasiona el conocer a fondo lo que estoy haciendo. Entonces es indagar del porqué, desde ceros. En mi caso pues me tocó checar para qué servía cada máquina y cada material que se usara, para que me diera el rendimiento que yo necesitaba», comentó.

La pasión por lo que se hace, así como hacerlo con una actitud de aprendizaje continuo, son valores que destacó como herramientas básicas para emprender un proyecto de negocio.

«Yo creo que sí, yo creo que las personas que se dedican a eso son de las más exitosas. Sí es de la forma en que a mí me gusta trabajar y que sí recomiendo que lo hagan, que es conocer a fondo lo que quieren… de entrada que les guste, porque yo creo que hacer un negocio por más que tú sepas del tema, y no es algo que te llene, nunca vas a ser feliz, y eso, aunque seas para la vista de los otros el más exitoso, tú nunca vas a ser exitoso si no te sientes feliz con ello», afirmó.

Al respecto de lo que significa para ella el proyecto que encabeza, resaltó:

«Sí, así es, este es mi proyecto de vida y tuve la fortuna de que de esto que me gusta pude hacer un negocio».

Del mismo modo, invitó a aquellos que tengan la inquietud de emprender algún proyecto, a que sean perseverantes en sus intenciones, pues para ella esta es una cualidad indispensable:

«Bueno, mi mensaje sería que si tienen algo pensado ya hacer, que no lo dejen y que estén tratando de involucrar todo lo que hagan, que vaya ligado a lo que quieran hacer, o sea tampoco puede ser que si tú dices “yo quiero ser el mayor creador de llantas”, y te pongas a criar animales, también tienes que ser como congruente, si algo quieren, que no lo dejen, que no lo dejen».

Ante los nuevos modos en que se desarrolla la economía global, el emprendedurismo es una de las alternativas, por la que cada vez más jóvenes se decantan.