Entre deudas y polémicas, el PRI busca la democracia interna 




En Jalisco se instalaron 273 casillas en los 125 municipios  para que la militancia del PRI eligiera a su próxima dirigencia nacional entre Alejandro Moreno,  Ivonne Ortega y Lorena Piñón.

El presidente del PRI Jalisco, Ramiro Hernández, el ex gobernador, Aristóteles Sandoval Díaz y el ex senador, Jesús Casillas fueron algunos de los priistas jaliscienses que difundieron por medio de redes sociales su participación en el proceso interno.

A través de Twitter, el ex mandatario invitó a la militancia a salir a votar.

https://twitter.com/AristotelesSD/status/1160613589427863556?s=19

La mesa estuvo puesta para que 313 mil priistas jaliscienses emitieran su voto en una contienda interna, que tuvo un costo de 80 millones de pesos y que obligó a su partido a endeudarse más.

Al emitir su voto, el secretario General del PRI, Arturo Zamora reconoció que  las finanzas del partido no son buenas y  que tuvieron empañar la antigua sede de la Confederación Nacional de Organizaciones Populares para poder hacerse de los recursos necesarios y llevar a cabo la elección, cuyos resultados generales se darán a conocer hasta el martes en Jalisco.

 La polémica de la jornada la protagonizó el propio Arturo Zamora, quien al momento de emitir su voto traía en sus manos una credencial del elector de otra persona, lo que fue captado en una fotografía.

El secretario general lo atribuyó a que traía dos identificaciones, la suya y la de su acompañante, a quien se le cayó en el vehículo donde viajaban. 

Más tarde, Arturo Zamora difundió fotografías, en las que mostraba que votó con su propia credencial.

El ex senador, Jesús Casillas abonó a la polémica al afirmar que el dirigente tuvo que ir otra vez a la casilla para fotografiarse con su INE y desacreditar la evidencia que había de que votó con otra identificación.