Fráncfort, Alemania.

Apenas un 8.2 por ciento de la pequeña y mediana industria de Alemania redujo su plantilla en el marco de la crisis generada por la pandemia de coronavirus, señala una encuesta representativa realizada por el banco alemán DZ Bank en abril entre mil 43 pequeñas y medianas empresas (pymes).

Las cifras indican que un 21 por ciento de las compañías solicitó préstamos de urgencia y que el 54.5 por ciento se acogió al régimen de jornada laboral reducida.

Esta modalidad para evitar despidos consiste en un subsidio implementado por el Gobierno alemán que cubre gran parte del salario y que es mayor si el empleado tiene hijos a cargo.

"Es satisfactorio comprobar que las pymes luchan por salir adelante a pesar de las dificultades del mercado y que la mayoría busca soluciones alternativas para asegurar su volumen de ventas", resumió Uwe Berghaus, miembro de la junta directiva del DZ Bank, al hacer públicos los resultados del estudio.

Añadió que varias compañías reestructuraron sus plantas para la producción de otro tipo de bienes. Asimismo, observó que las medianas empresas se enfrentan a la crisis con reservas de capital propio relativamente altas.

Sin embargo, el DZ Bank aclaró que muchas empresas necesitarán el apoyo del Estado para evitar caer en la insolvencia debido a la crisis económica generada por la pandemia.

Antes de las restricciones para contener la propagación del coronavirus, más de tres cuartos de las pymes alemanas calificaban su situación empresarial como "buena" o "muy buena", mientras que ahora solo la mitad de ellas lo afirma.

El estudio detalla que las pequeñas y medianas empresas pertenecientes a la industria metalúrgica, mecánica, automotriz y de servicios están particularmente preocupadas.

Pero también hay rayos de esperanza: los autores del análisis señalaron que, hasta ahora, la crisis tuvo escaso impacto negativo en la industria de la construcción.

Añadieron que la situación de la industria química, farmacéutica así como de la industria del plástico es asimismo relativamente buena.

Por su parte, un estudio reciente del banco estatal de desarrollo KfW indicó que en marzo el 58 por ciento de las 3.8 millones de pymes de Alemania redujo casi a la mitad la facturación que suele registrar en dicho mes.

Según los cálculos de la entidad financiera, los ingresos de las pymes mermaron en unos 75 mil millones de euros (82 mil 278 millones de dólares), lo que supone el dos por ciento de su volumen de negocios anual.