EEUU autoriza pagos de Trinidad y Tobago a Venezuela por explotación de gas
Primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley. EFE/Andrea De Silva




Puerto España, Trinidad y Tobago.

Estados Unidos autorizó a Trinidad y Tobago a pagarle a Venezuela por la explotación de gas en el campo Dragón, tras enmendar la licencia que permitía operaciones pero impedía pagos a Caracas, sometido a sanciones, anunció el martes el ministro de Energía trinitense, Stuart Young.

La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro estadounidense, encargada de hacer cumplir las sanciones, había autorizado en enero a Trinidad y Tobago a explotar el campo con la condición de no pagar un solo dólar a Venezuela. 

"Me complace decirle al pueblo de Trinidad y Tobago que hoy el gobierno de los Estados Unidos ha emitido a través de la OFAC del Tesoro al Gobierno de Trinidad y Tobago una enmienda a la licencia", dijo Young en una conferencia de prensa.

  • La enmienda permite el trabajo conjunto de la Compañía Nacional de Gas de Trinidad y Tobago, la británica Shell y la venezolana PDVSA "para el desarrollo, la producción y la exportación de ese gas", y para que se puedan hacer los pagos tanto en dinero como "a través de medidas humanitarias, que es lo que se previó inicialmente", continuó Young.

La licencia modificada tendrá una duración de dos años, hasta el 31 de octubre de 2025, según el ministro de Energía.

El yacimiento Dragón, con 120 millones de metros cúbicos de gas, está ubicado al noreste de Venezuela, cerca de la frontera marítima con Trinidad y Tobago, adyacente a campos trinitenses operados por la trasnacional británica Shell.

Trinidad y Tobago, el mayor productor de gas del Caribe,Venezuela, habían firmado en 2016 un memorando de entendimiento para realizar estudios técnicos y comerciales con miras a una explotación compartida.

El pasado septiembre, los países firmaron un acuerdo para la explotación conjunta de gas en ese campo.

El primer ministro de Trinidad y Tobago, Keith Rowley, había descrito el acuerdo firmado como "una enorme roca diplomática" debido, precisamente, a los obstáculos para pagarle a Venezuela.