Por Gabriela Arreola
Como cierre de la V Feria de las Humanidades y de las Ciencias Sociales, se realizó la ceremonia de entrega del Galardón Carlos Terrés, premio que en esta ocasión le fue otorgado al político y académico José Trinidad Padilla López, reconociendo su trayectoria y el mérito personal de haber contribuido por un largo tiempo al desarrollo de la Universidad de Guadalajara.
Una estrecha relación con Lagos, su gente y su universidad
Ayer por la tarde, en el Teatro José Rosas Moreno, autoridades universitarias y gubernamentales, además de alumnos y personal académico del CULagos, se dieron cita en el recinto para presenciar el acto. Horas antes, en rueda de prensa para los medios locales, Padilla López dijo sentirse muy entusiasmado por la presea; además, recordó la amistad que ha cultivado con muchas personas originarias de Lagos de Moreno, en especial con el artista plástico Carlos Terrés, quien desde la primera edición del galardón se ha encargado de la creación de la estatuilla que lleva su nombre.
«¿Qué puedo decir?, estoy muy contento, me da mucho gusto saber que la comunidad universitaria de mi alma mater, que es la Universidad de Guadalajara, me honra con esta distinción. Yo he tenido siempre una relación muy estrecha con muchos amigos laguenses y estuve desde el inicio de lo que era el proyecto de la red universitaria, en la década de los noventa, cuando se instaló aquí lo que era un campus, que muy pronto mostró una vocación de desarrollo estratégica», compartió.
Rueda de prensa con Trinidad Padilla López
El galardón Carlos Terrés es un premio que se otorga a una persona o institución que haya destacado por sus aportes a las Ciencias Sociales y a las Humanidades. Otro de los requerimientos consiste en ser originario o tener relación con los Altos de Jalisco. En el caso del doctor José Trinidad Padilla López, su madre nació en Arandas y su padre era originario de Tepatitlán. No menos importante, su contribución a la región fue haber sido una pieza clave para la fundación del Centro Universitario de los Lagos, pues durante su gestión como rector general de la Universidad de Guadalajara permitió que la casa de estudios se consolidara, lo que con el paso del tiempo ha beneficiado a la población de Lagos y a sus alrededores.
Por primera vez el premio se queda en casa
Por su parte, el doctor Aristarco Regalado Pinedo, celebró que por primera ocasión el galardón hubiera sido entregado a una persona de la propia Universidad de Guadalajara.
«No habíamos tenido un galardonado de casa, de la Universidad de Guadalajara, y ahora, por primera vez, es alguien de casa quien va a recibir este reconocimiento y por eso me da mucha alegría. Hemos tenido galardonados de Los Altos, pero de otras partes también, del mundo, y ahora pues es alguien nativo de Guadalajara, pero cuyos padres en efecto son alteños y que además es de nuestra casa de estudios».
Antes de la ceremonia, Trinidad Padilla López ofreció una conferencia magistral en la que abundó sobre la autonomía de la Universidad de Guadalajara, enfatizando los cambios que ha tenido que hacer la institución educativa para adaptarse a los cambios ideológicos y a las fuerzas políticas externas.