Ciudad de México, México.

El un mensaje que estuvo lleno de cifras de todo el sexenio y no sólo del último año, el presidente Enrique Peña Nieto dio su mensaje con motivo de su quinto informe de gobierno.

El primer mandatario presumió que gracias a su administración:

“México está hoy mejor que hace cinco años”

El presidente aceptó, en la primera parte de un mensaje que superó los 75 minutos, que la seguridad no ha mejorado. Y aunque los homicidios ya no son vinculados totalmente al crimen organizado, son los Estados y municipios los que deben poner más atención en este aspecto.

Indicó que en los primeros 4 años se disminuyeron los delitos de fuero común, así como la reducción de homicidios dolosos, expresó que esos resultados se revirtieron y que los poderes de gobierno deberán trabajar en conjunto.

Sin mencionar los nombres de los gobernadores que se encuentran sujetos a proceso judicial por presuntos actos de corrupción, el presidente dijo que deberán ser juzgados sin ver colores ni cargos que ostentaban.

"Están siendo investigados y procesados por las instituciones correspondientes, sin importar su afiliación partidista ni la posición que hayan ocupado."

Entre los logros que destacó el presidente fueron las cifras recientemente dadas a conocer por el CONEVAL, que afirmó que dos millones de personas salieron de la pobreza en los últimos cuatro años. La promesa del presidente es que, de seguir con esta lógica, México podría eliminar la pobreza extrema en dos décadas.

Fotografía: Pedro Pardo -
AFP

La ovación más marcada que recibió el mandatario, arropado por invitados especiales que se dieron cita en Palacio Nacional, fue cuando habló de la relación que tendrá su gobierno con el presidente Donald Trump.

“No aceptaremos nada que vaya en contra de nuestra dignidad como nación”.

Aunque a la administración federal le restan 15 meses de gobierno, Enrique Peña Nieto utilizó la última parte de su discurso para hacer un tipo de despedida y advertencia, sobre lo que se avecina con el periodo electoral.

Aunque fue un discurso que superó una hora de tiempo, los temas que no se tocaron fueron el gasolinazo, el aumento de las tarifas eléctricas, las fallas en las obras públicas como la del Paso Express, ni tampoco las acusaciones que enfrenta el ex titular de Pemex, Emilio Lozoya, por supuestamente haber recibido 10 millones de dólares para dirigir contratos de pública a la empresa Odebrecht.