Los Angeles, Estados Unidos
El colapso de un túnel en el sitio nuclear más contaminado de Estados Unidos ha levantado cuestionamientos sobre la seguridad en este tipo de instalaciones que muchos describen como una bomba de tiempo.
Trabajadores comenzaron el lunes a reparar uno de los túneles en Hanford Site en el estado de Washington (oeste), que llevó a declarar una emergencia el día anterior.
El Departamento de Energía (DoE), que opera la instalación, informó que unos 50 camiones de tierra fueron usados para tapar el hoyo de unos 6x6 metros en el conducto donde fueron almacenados vagones cargados con desechos altamente contaminantes.
El túnel es uno de los dos usados para colocar material radiactivo del tiempo en que se producía allí plutonio para el arsenal nuclear estadounidense, incluido el usado para la bomba lanzada en Nagasaki con la que terminó la II Guerra Mundial.
El colapso, que fue detectado en una inspección de rutina, puso el foco en Hanford, considerado "el lugar más tóxico en Estados Unidos" y donde otros accidentes se han registrado en los últimos años.
"Hay varios desastres que pueden pasar allá, y uno puede llevar al otro", advirtió Tom Carpenter, director de la ONG Hanford Challenge, que vigila los trabajos de limpieza en esta área y ha representado legalmente a informantes de fallas de las plantas y otras instalaciones nucleares.
Carpenter indicó que aunque no se detectó contaminación en el túnel, el incidente resalta los desafíos que tiene un proyecto de limpieza en esa inmensa instalación de 1.500 km2, que debe concluir en 2060 a un costo estimado de 100.000 millones de dólares.
"Hay tanta basura y desecho radiactivo enterrado en todo el lugar. La instalación está decrépita, el hormigón está en decadencia y hay estudios e ingenieros que trabajan allí y dicen: 'No creo que dure más de cuatro años'", alertó.
El último reactor de Hanford cerró en 1987, pero millones de galones de residuos están en 177 tanques, muchos construidos durante los años 1940 y 1950, que han registrado fugas y no aguantarían un terremoto.
Carpenter hizo referencias a opiniones de expertos sobre los túneles y una planta de plutonio y uranio en el área (PUREX) como una zona de gran riesgo, que según dijo, el DoC no ha tomado en serio.
"Creo que se dicen que como no ha pasado aún probablemente no pasará, lo que es una manera absurda de llevar una instalación nuclear", reclamó.
- Lento y metódico -
John Garrick, un experto en desechos nucleares, coincide en que Hanford es probablemente el sitio nuclear con mayores desafíos en el país, pero aseguró que las instalaciones, como la mayoría en el país, están en buenas condiciones.
"Definitivamente no está fuera de control", explicó este profesor universitario, que también estuvo a la cabeza de la junta encargada de revisar desperdicios nucleares hasta 2012.
"No es un desastre desde un punto de vista público", aunque muestra "los continuos problemas asociados con este legado de residuos, que se generaron durante el desarrollo y fabricación de armas nucleares".
Destry Henderson, vocero del Centro de Emergencia de Hanford, dijo a la AFP que estaba previsto que el agujero fuera sellado el miércoles.
"Colocamos grava sobre la que operará maquinaria pesada hoy para colocar la tierra, lenta y metódicamente en la porción afectada del túnel", señaló.
Hanford, a 275 km de Seattle, tiene unos 9.000 empleados, la mayoría licenciados este miércoles como medida de precaución.