Javier Herrera, Nuncio Apostólico nombrado por el Papa Francisco en El Congo y Gabón




Autlán de Navarro, Jalisco.

El Seminario Diocesano de Autlán “Santa María de Guadalupe” fue sede de la ordenación episcopal de Monseñor Javier Herrera Corona, elevado a la dignidad de arzobispo y nombrado Nuncio Apostólico en la República del Congo y Gabón por el Papa. El acto de ordenamiento se realizó en presencia de fieles, figuras políticas de los diversos municipios que pertenecen a esta diócesis, más de 200 sacerdotes, presbíteros y autoridades eclesiásticas, en una ceremonia presidida por Pietro Parolin, Secretario de Estado de la Santa Sede.

Un Nuncio apostólico es el representante del Papa en un país; su voz y ojos. Es el símil al embajador civil. El primer Nuncio de origen mexicano fue Monseñor Luis Robles, nacido en El Grullo, ordenado obispo en 1985 y enviado a Sudán. Sus restos descansan en la Parroquia Santa María de Guadalupe de El Grullo, Jalisco. El segundo nuncio mexicano es Fermín Sosa, ordenado el pasado año en la ciudad de Mérida Yucatán.

Javier Herrera Corona, tercer nuncio mexicano, comenzó su servicio diplomático en la Santa Sede en 2003. Ha formado parte de comisiones representantes en Kenia, Perú y Hong Kong.

El Cardenal Pietro Parolin dijo que el nuncio es un puente para dar a conocer las principales directrices de la doctrina social de la Iglesia: la defensa de la vida en todas sus etapas, la protección al medio ambiente y el fomento de la paz.

“El nuncio es un puente entre el Papa y la Santa Sede; es, además, un puente entre la Iglesia Universal y cada Iglesia particular. Por tanto, el dará a conocer las principales directrices de la doctrina social de la Iglesia: el magisterio de los Papas acerca de la defensa de la vida humana en cada una de sus etapas: desde la concepción hasta su muerte natural, mostrará la preocupación del Papa por el deterioro en todo el planeta; las condiciones ambientales y climáticas. Actuará en cada contexto para favorecer el entendimiento y la paz dentro de las naciones frente al problema de la violencia”

El arzobispo Javier Herrera Corona se dijo contento y honrado por su nueva encomienda, resaltó que, con este nombramiento, Autlán se pone en el mapa gracias a la fe del pueblo. El nuncio habló de sus primeras encomiendas en el Congo y Gabón.

“La primera encomienda es decirles: aquí estoy, ya llegué. Los presidentes y los católicos del Congo y Gabón, inmediatamente después del anuncio de mi elección, ya me estaban diciendo: ¡Ya véngase! ¡Ya véngase! Tienen siete meses sin nuncio allá. Voy con muchas ganas, y, en segundo lugar, llevarles el saludo del Papa y comenzar a trabajar desde el primer día”

Este martes, Javier Herrera Corona partirá a la ciudad de Roma, tendrá una estadía de cuatro días en los que agradecerá la encomienda del Papa y estará presente en la visita de Estado del presidente de Gabón. El 1 de mayo se presentará en la capital del Congo, donde tendrá su primera participación pública.


Antonio Díaz