Acuerdo del G7 para cerrar las centrales térmicas de carbón sin captura de carbono antes de 2035
EFE/ Alberto Valdés-Archivo




Turín, Italia.

Las potencias del G7 decidieron suprimir progresivamente y a más tardar en 2035 sus centrales eléctricas de carbón, a excepción de las que se doten de tecnologías de captación de carbono.

El carbón es el combustible fósil más contaminante, y los defensores del medio ambiente habían instado al G7 -que incluye a:

  • Italia
  • Canadá
  • Francia
  • Alemania
  • Japón
  • Reino Unido
  • Estados Unidos- a dar el ejemplo.

Por ello el grupo acordó "eliminar gradualmente la generación de electricidad a partir de carbón en sus sistemas energéticos en la primera mitad de la década de 2030", según anunciaron los países miembros en un comunicado de prensa tras una reunión de sus ministros de Medio Ambiente y Energía en Turín (norte de Italia).

Los países podrán seguir "un calendario compatible con el mantenimiento de un límite de aumento de la temperatura de +1,5°C, en línea con las trayectorias de neutralidad del carbono".

  • Además se permitirá que continúe la generación eléctrica a partir de carbón en los casos donde se instalen sistemas de captura de las emisiones de CO2, decisión criticada por los ecologistas.

Para Luca Bergamaschi, del grupo de reflexión sobre el clima ECCO, el G7 dio "un paso decisivo" al trasladar el acuerdo de Dubái a la legislación nacional, y el World Resources Institute saludó el compromiso como

"un faro de esperanza para el resto del mundo".

Por su parte, Andreas Sieber, de la organización de protección del clima 350.org, lo calificó de "progreso importante pero insuficiente", mientras que el Institute for Climate Analysis opinó que

"2035 es demasiado tarde", calificando de "notable que no se haya mencionado el gas",

a pesar de ser la mayor fuente de aumento global de emisiones de CO2 en la última década.

Los ministros del G7 anunciaron que aumentarían "más de seis veces" los sistemas de almacenamiento de energía (baterías, presas dobles, térmicos y otros en desarrollo) de aquí a 2030, para optimizar el uso de fuentes de energía renovables.