2 estudiantes muertos y una patrulla quemada deja nuevo altercado en Guerrero
Al menos dos estudiantes muertos y una camioneta incendiada de la Policía Estatal de Guerrero fue el resultado de un nuevo encuentro entre estudiantes normalistas de Ayotzinapa y autoridades estatales. EFE/Sáshenka Gutiérrez




Chilpancingo.

Al menos dos estudiantes muertos y una camioneta incendiada de la Policía Estatal de Guerrero, en el sur de México, fue el resultado de un nuevo encuentro entre estudiantes normalistas de Ayotzinapa y autoridades estatales durante la noche de este jueves en Chilpancingo.

De acuerdo con información de la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero, a las 20:45 horas (02:45 horas GMT) un arco detector del  Registro Público Vehicular (Repuve), instalado en la carretera Tixtla-Chilpancingo, ubicó una camioneta blanca con reporte de robo.

Detalló que al pedir que se detuviera el vehículo, el conductor se negó, por lo que la policía disparó.

La camioneta era conducida por estudiantes de la escuela normal de Ayotzinapa: uno de ellos, el conductor, resultó asesinado y uno más, herido, mismo que después de ser trasladado a un hospital falleció, de acuerdo con la fuente.

Según el comunicado de la SSP en la  camioneta se localizó un arma de fuego corta y cartuchos útiles, tres bolsas de una sustancia cristalina y cervezas; sin embargo, los normalistas denunciaron que les "fue sembrado".

  • La corporación policíaca del sureño estado de Guerrero informó también que hay otro joven detenido.

En respuesta al ataque, normalistas a bordo de tres autobuses y dos camionetas, retuvieron a la patrulla de la Policía Estatal marcada con el número 732, que estaba frente al cuartel de la Policía Preventiva Municipal y la incendiaron en la transitada avenida Insurgentes.

En tanto, esta noche efectivos de la Guardia Nacional resguardan las instalaciones de las oficinas del Poder Ejecutivo ante posibles movilizaciones de los normalistas.

El nuevo ataque a los normalistas se da en el contexto de su reciente protesta en la Ciudad de México, en donde el miércoles derribaron una puerta de Palacio Nacional para exigir al presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, que reciba a los padres de sus 43 compañeros desaparecidos en Iguala el 26 y 27 de septiembre de 2014.

López Obrador acusó a los abogados y organismos defensores de derechos humanos de querer provocar y retrasar las investigaciones, manipulados por la Organización de los Estados Americanos (OEA).

Al respecto, los padres y madres respondieron en conferencia de prensa este jueves, en la escuela normal de Ayotzinapa, que no aceptarán un diálogo con López Obrador si no es con sus abogados, a quienes defendieron.