Guadalajara, Jalisco.
El aislamiento social es un lujo que no pueden darse los comerciantes del Tianguis de Tonalá, quienes se instalaron el domingo con escasa afluencia de clientes.
En un común acuerdo entre comerciantes y autoridades municipales, el tradicional mercado de artesanías se llevó a cabo con medidas sanitarias: la mayoría de los comerciantes portaban cubrebocas y brigadas del ayuntamiento de Tonalá repartieron gel antibacterial entre los pocos consumidores que salieron hacer compras. Uno de ellos fue Carlos Enrique Marín, quien acudió a comprar una gorra para su trabajo.
“Traemos gel y todo eso, nada más venimos por eso, ya no vamos a casa, nada más venimos por eso, si no, no salimos”.
Los comerciantes sabían que no iban a tener un gran día: Maura Alcalá instaló su puesto de cocos y fruta con menos mercancía de lo habitual para tratar de salvar algo de venta, Mario Martínez buscó una mejor ubicación para sus accesorios de celular a fin de sacar algo para pagar los servicios básicos de su casa y el payaso Chapetín salió a la calle con la esperanza de recaudar al menos 200 pesos de propina con su show, con el cual se lleva hasta 800 pesos en un buen domingo.
Los miembros del Tianguis de Tonalá esperan el apoyo prometido por parte del ayuntamiento para poder sortear las dificultades económicas por la baja en ventas. El alcalde, Juan Antonio González promete al menos despensas y analizar la posibilidad de una ayuda económica.