Washington, Estados Unidos.
Economistas de empresas estadounidenses están preocupados por las complicaciones políticas del presidente Donald Trump y los potenciales riesgos de sus intenciones comerciales y de inmigración, según una encuesta divulgada el lunes.
Ese sondeo es otra muestra de que la comunidad empresarial se están alejando de Trump. Ya la semana pasada, los presidentes de varias corporaciones renunciaron a consejos asesores de Trump luego de que el presidente dijera que ambas partes tuvieron responsabilidad en los choques entre supremacistas y antiracistas en Virginia que dejaron un muerto.
Aunque la encuesta fue hecha una semana antes de esos incidentes, igualmente muestra la creciente preocupación de empresarios que celebraron en noviembre la victoria de Trump porque prometía rebajarles impuestos para impulsar la economía.
"Pienso que parte de la preocupación surge de lo que ocurrió recientemente, que puede perjudicar la capacidad de la administración para aprobar su agenda legislativa", dijo Frank Nothaft, analista de la organización de economía empresarial estadounidense NABE.
Tras aclarar que no habla en nombre de quienes prepararon el informe político semestral de la NABE, Nothaft dijo a AFP que el gobierno de Trump tiene muchas ideas legislativas que podrían estimular el crecimiento económico y potenciar el gasto.
Empero "todo lo que ha ocurrido pone en riesgo esa agenda legislativa. ¿Aprobarán algo?", se preguntó.
La encuesta de NABE, que agrupa a académicos, empresarios y funcionarios, mostró que actualmente la mayoría los economistas considera "casi correcta" la política fiscal actual pero, a la vez, son "bastante pesimistas por la concreción a corto plazo de una significativa reforma fiscal neutra" mostró la encuesta.
- 'Notas desfavorables' -
Realizada entre el 18 de julio y 2 de agosto entre 184 integrantes de la NABE, la encuesta mostró que se le asigna apenas un 10% de chances a que esa legislación se sancione este año y 15% en 2018.
Más de la mitad de los interrogados estimó que la reforma impositiva agregaría menos de un punto porcentual al crecimiento del PIB real en los próximos 10 años. Un tercio cree que el impacto se situará entre uno y dos puntos porcentuales.
La encuesta mostró también la preocupación por las "desfavorables consecuencias" que tendrían las políticas de Trump en materia de comercio e inmigración.
En esas áreas "los participantes de la encuesta le dieron notas desfavorables a la administración, dijo el responsable del estudio Richard DeKaser, que además es vicepresidente y economista corporativo del banco Wells Fargo.
Nothaft, economista jefe de la firma CoreLogic, explicó que todo lo que pueda arrojar sombras a las perspectivas de futuras inversiones, puede retrasar los gastos de las compañías con el consiguiente impacto en la economía.
Cuando las políticas "fluctúan y el ambiente puede cambiar dramáticamente, las compañías podrían detenerse", dijo. "La inversión es una parte importante del crecimiento del PIB", añadió.
Asimismo, las restricciones a la inmigración castigan a las compañías pues ya tienen actualmente dificultades para encontrar mano de obra; especialmente en alta tecnología y construcción.