Nueva York, Estados Unidos.
La "alquimia" de la novela de Laura Esquivel "Como agua para el chocolate" (1989) sedujo al American Ballet Theater de Nueva York, que la representará en la Met Opera, en una gala en la que estará presente la autora mexicana.
Los bailarines, contagiados por la plasticidad del relato, rompen sobre el escenario con la rigidez del ballet clásico para dejarse llevar por los sentimientos y sumergirse en los territorios de la danza moderna y el realismo mágico.
"Creo que lo más difícil para un bailarín de ballet clásico es que estamos muy acostumbrados desde pequeños a pensar en la forma, en la postura y estos son roles más humanos. Entonces al principio era un poco difícil deshacerse de esa postura y de la formación clásica tan purista", asegura tras un ensayo la bailarina argentina Luciana Paris, que interpreta el papel de la cocinera Nacha.
Las tres horas que se prolonga la obra, que el año pasado fue llevada a escena por el Royal Ballet de Londres, también de la mano del coreógrafo Christopher Wheeldon, están llenas de momentos "mágicos", como apunta la propia Esquivel.
Las bailarinas del American Ballet Theater Cassandra Trenary (i) y Luciana Paris fueron registradas durante un ensayo de la obra "Como agua para el chocolate", en la Chelsea Factory, en Nueva York (NY, EE.UU.). EFE/Ángel Colmenares
Uno de ellos sorprende en el arranque, cuando la sábana blanca con la que Nacha cubre a la protagonista Tita cuando todavía es un bebé, se convierte en masa de pan que amasan Nacha y una Tita ya adolescente, ansiosa por aprender todos los secretos de la cocina.
"El reto para mí era encontrar, en esos primeros momentos, una forma de conectar a través del movimiento a Tita y su relación amorosa con la cocinera de la familia Nacha y su relación con la cocina", aseguró Wheeldon al público que acudió a un ensayo de tres escenas de la obra.
La representación de la muerte de Nacha sobre el escenario con un simple movimiento del pecho que se eleva o de la represión y la liberación de Tita a través del atado y desatado de un corsé, son otros de los momentos que Esquivel considera cargados de alquimia.
"Christopher es en verdad un alquimista del movimiento, es impresionante la forma en la que puede traducir y narrar. Traducir de un lenguaje a otro, al movimiento, y provocar emociones tan profundas", dice Esquivel en una llamada desde Brasil, donde ejerce como embajadora de su país.
El coreógrafo Christopher Wheeldon (c) fue registrado al posar en medio de los bailarines del American Ballet Theater: Daniel Camargo (i), SunMi Park (2i), Luciana Paris (2d) y Cassandra Trenary (d), durante un ensayo de la obra "Como agua para el chocolate", en la Chelsea Factory, en Nueva York (NY, EE.UU.). EFE/Ángel Colmenares
- Los talibanes celebran dos años de la "conquista de Kabul" - 15 agosto, 2023
- Ticketmaster lanza boleto digital con el que promete acabar con fraudes - 15 agosto, 2023
- Naasón Joaquín dirige mensaje a fieles en ceremonia principal de la Luz del Mundo - 15 agosto, 2023