Dublín, Irlanda.
Irlanda decidirá en mayo o junio de 2018 si liberaliza el aborto pronunciándose en referéndum sobre la enmienda constitucional que lo impide, anunció este martes el gobierno irlandés.
En concreto, el referéndum servirá para derogar o mantener la octava enmienda constitucional, que hace ilegal el aborto excepto en caso de peligro grave para la madre.
"Cualquier enmienda a nuestra Constitución requiere una cuidadosa consideración de nuestro pueblo", dijo el primer ministro Leo Varadkar, al anunciar el calendario de referéndums de los próximos dos años, entre los que hay uno también para abolir el delito de blasfemia, en octubre de 2018, y otro para reducir de cuatro a dos años el periodo mínimo que ha de convivir una pareja antes de divorciarse.
Irlanda, donde la antaño todopoderosa Iglesia Católica ha ido perdiendo influencia, ya recurrió al referéndum para legalizar el matrimonio homosexual, en 2015.
El aborto siempre fue ilegal en Irlanda, salvo en el supuesto mencionado, pero la prohibición no se incluyó en la Constitución hasta 1983, mediante un referéndum instigado por grupos antiaborto.
En 2011, el Comité de Derechos Humanos de la ONU denunció el trato "inhumano" a una mujer con un embarazo inviable en Irlanda y que, como miles de compatriotas suyas hacen cada año, tuvo que ir al Reino Unido a poner fin al embarazo.