El papa Francisco recibirá a más víctimas de pedofilia de reconocido cura chileno




Ciudad del Vaticano, Santa Sede

El Papa Francisco se reunirá con un segundo grupo de víctimas del reconocido sacerdote pedófilo chileno, Fernando Karadima, anunció el martes el Vaticano.

El Vaticano dijo que entre el 1 y 3 de junio Francisco sostendría en el Vaticano reuniones privadas con víctimas de abuso de Karadima, entre ellos cinco curas.

Todos acusan de abuso sexual al sacerdote Fernando Karadima, quien fue obligado a jubilarse en 2011 después de ser declarado culpable por la Santa Sede.

"Con esta nueva reunión, el Papa Francisco quiere mostrar su cercanía a los sacerdotes abusados, acompañarlos en su dolor y escuchar su valiosa opinión para mejorar las medidas preventivas actuales y la lucha contra los abusos en la Iglesia", dijo el comunicado del Vaticano.

El anuncio se produce después de que el sumo pontífice recibiera a finales de abril en el Vaticano a otras tres víctimas de Karadima: José Andrés Murillo, James Hamilton y Juan Carlos Cruz.

El papa anunció la semana pasada que se disponía a tomar medidas severas, "cambios y resoluciones" dentro de la Iglesia de Chile para "restablecer la justicia" en la institución, dijo tras leer un largo informe sobre los abusos infantiles dirigido a los 34 obispos de ese país convocados por él en el Vaticano.

Los 34 obispos chilenos renunciaron el viernes en bloque tras los escándalos de abusos sexuales cometidos por religiosos en su país, en un gesto inédito en la historia reciente de la iglesia católica.

En la declaración, los obispos volvieron a "pedir perdón por el dolor causado a las víctimas", les agradecieron "su perseverancia y valentía" a pesar de las dificultades y de "los ataques de la propia comunidad eclesial".

Entre los 34 obispos presentes figuran varios de los acusados de haber encubierto durante décadas los abusos cometidos por el sacerdote Fernando Karadima, suspendido de por vida después de haber sido declarado culpable en 2011 de abusos sexuales a menores en los años 1980 y 1990.

El Papa aún no ha anunado si aceptará sus renuncias.