Guadalajara, Jalisco. 

Una de las principales recomendaciones que hacen los expertos en salud para evitar contraer enfermedades como el COVID-19, es evitar el contacto físico y de superficies, además de quedarse en casa, sin embargo, para las personas que tienen algún tipo de discapacidad visual, el tocar las cosas es parte de su rutina de reconocimiento del entorno y el dejarlo de hacer o extremar medidas en este sentido ha sido un reto.

Eneida Guadalupe Rendón, quien vive con sordoceguera y es responsable de servicios especializados para personas con discapacidad visual de la biblioteca UdeG Virtual, asegura que para quienes viven con cualquier tipo de discapacidad, el confinamiento es una rutina que ahora pueden experimentar las personas regulares.

“¿Sabía usted que en el mundo existimos personas que vivimos en aislamiento y en cuarentena, todo el año, todo el tiempo, muchos años, y algunas veces hasta toda la vida? Y pues esa frase sí que nos hace pensar en que, pues de repente, vemos la parte oscura y no todas las ventajas que podemos encontrar, y no vemos cómo otro sector de la población como es el caso de las personas con sordoceguera y con discapacidad múltiple están teniendo dificultades porque no tienen la tecnología”.

Aunque hay propuestas culturales y de enseñanza virtual adaptadas para personas con discapacidad, estas no son suficientes y no se encuentran al alcance de su público. Los contenidos de cualquier índole siguen siendo diseñados para las personas ordinarias y segregan a una comunidad que representa al menos el 15 por ciento de la población mundial.

Israel Huerta, quien es psicólogo especialista en inclusión educativa y miembro de la Unidad de Educación Incluyente del CUCS, detalla que muchas de las personas con discapacidad son omitidas en la vida diaria, se les restringe de su participación, de su decisión, de su denominación, inclusive para legislar y para tomar representación científica y legislativa. Es por esto que desde los movimientos sociales y de investigación surgidos en Europa se propone la reclasificación de la discapacidad, donde la sociedad también tiene la responsabilidad de inclusión.

“La discapacidad ya no se le atribuye a la persona, sino la discapacidad está en todos aquellos como miembros de la sociedad o personas regulares u ordinarias que impedimos el acceso de estas personas por medio de las limitantes que ponemos y esto usualmente está relacionado a tres puntos: a las barreras culturales que ponemos; a las barreras políticas, las barreras sociales; y hay quien incluso agrega las barreras aptitudinales y esto justamente se debe a la falta de distinción”.

Estos y más temas fueron abordados en el Webinar “Discapacidad en tiempos de pandemia” organizado por la Universidad de Guadalajara donde también participaron José Antonio Olivo, Rayo O’Brien y León Coronado, y la periodista Ivabelle Arroyo como moderadora. Esta mesa de diálogo virtual está disponible a través de las cuentas de Youtube y Facebook de Canal 44.