Naciones Unidas, Estados Unidos.
Estados Unidos votó en contra de un proyecto de resolución de la Asamblea General de las Naciones Unidas (AGNU) que pide el levantamiento del embargo económico y comercial de Estados Unidos a Cuba.
El proyecto de resolución fue aprobado 191-2. Estados Unidos e Israel fueron los únicos países que votaron en contra.
En un discurso de línea dura en la Asamblea General antes de la votación, la embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Nikki Haley, responsabilizó a Cuba del embargo.
"Por vigesimoquinta ocasión en 26 años, Estados Unidos votará en contra de esta resolución", declaró Haley.
Haley acusó a La Habana de usar cada año a la votación de la AGNU "como un objeto resplandeciente para distraer la atención del mundo de la destrucción que ha infligido a su propio pueblo y a otros en el hemisferio occidental".
"Mientras el pueblo cubano siga siendo privado de sus derechos humanos y de sus libertades fundamentales, mientras los ingresos del comercio con Cuba se destinen a apoyar al régimen dictatorial responsable de negar esos derechos, Estados Unidos no teme al aislamiento en esta cámara (de la Asamblea General) o en cualquier otra parte", dijo la enviada estadounidense.
Haley indicó que la Asamblea General no tiene el poder de poner fin al embargo de décadas de existencia. Está basado en la ley estadounidense, que sólo el Congreso estadounidense puede cambiar, afirmó. La embajadora desestimó la votación en la Asamblea General y la calificó como un "teatro político" y una pérdida de tiempo.
El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, respondió que el bloqueo de Estados Unidos es "una flagrante, masiva y sistemática violación de los derechos humanos de todos los cubanos" y lo describió como "un acto de genocidio".
Al explicar la votación en contra de la adopción de la resolución, la colaboradora de Haley dijo que el gobierno cubano es el responsable del fracaso económico del país.
"Incluso si el Congreso de Estados Unidos levantara el embargo hoy, los cubanos no podrían realizar su potencial sin reformas políticas, económicas y sociales significativas de su propio gobierno", dijo Michele Sison.
El año pasado, Estados Unidos se abstuvo en una votación similar en la Asamblea General. Haley explicó que el giro de 180 grados se debe a la elección de Donald Trump como nuevo presidente y de ella misma como embajadora ante la ONU.
"A quienes están confundidos sobre dónde se encuentra Estados Unidos, permítanme ser clara: como es su derecho de acuerdo con la Constitución, el pueblo estadounidense ha hablado. Ellos han elegido a un nuevo presidente y él ha elegido a una nueva embajadora ante la ONU".
El Grupo de los 77 de países en desarrollo lamentó la nueva política de Trump que busca reforzar el embargo contra Cuba.
"El grupo considera que este es un retroceso en el proceso de normalización de las relaciones entre los dos países", dijo Diego Morejon Pazmino, embajador de Ecuador ante la ONU, en nombre del G77 y China.
El G77 y China expresaron su profunda preocupación por los prolongados efectos negativos que las sanciones económicas y las restricciones de viaje han tenido sobre Cuba y su pueblo.
China lamentó que no se hayan implementado las anteriores resoluciones de la Asamblea General al respecto. El bloqueo viola el propósito y principios de la Carta de la ONU y causa enormes pérdidas económicas a Cuba, dijo Wu Haitao, encargado de negocios de la misión china en la ONU.
Wu pidió a Estados Unidos y Cuba continuar con la normalización de las relaciones, lo que favorecería los intereses de ambos países. Wu pidió a Estados Unidos levantar su embargo contra Cuba.