Washington, Estados Unidos.

El secretario de Defensa estadounidense, Jim Mattis, dijo el martes que no habría cooperación con las fuerzas rusas en Siria sobre el tema de los refugiados, al menos por ahora.

Tras la reunión de la semana pasada entre los líderes Donald Trump y Vladimir Putin, Moscú había indicado la posibilidad de que Washington cooperara en el regreso de los refugiados a Siria.

El secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, confirmó el viernes que el tema había estado presente en el encuentro de los presidentes.

Pero funcionarios de Defensa negaron la posible cooperación con Rusia en Siria, donde los dos países desarrollan diferentes campañas militares.

No sólo porque una acción como esa requeriría un permiso especial del Congreso, sino porque el Pentágono responsabiliza a Rusia por varias muertes de civiles, y de contribuir a las condiciones que han dado lugar a los flujos de refugiados desde Siria.

Por el momento, la única coordinación entre la coalición dirigida por Estados Unidos con Rusia en Siria es una línea directa, para asegurar que no haya accidentes entre ambas operaciones que puedan involucrar a fuerzas terrestres o aéreas.

"No haremos nada hasta que el secretario de Estado (Mike Pompeo) y el presidente resuelvan en qué punto empezaremos a trabajar, junto a nuestros aliados, con Rusia en el futuro", dijo Mattis en conferencia de prensa en California.

"Eso no ha ocurrido todavía. Y sería prematuro entrar en detalles en esta instancia porque no estamos haciendo más que esto", indicó Mattis, en alusión a la comunicación con Rusia.

El General Joe Votel, responsable máximo de las operaciones militares de Estados Unidos en Siria, dijo el martes no haber recibido nuevas órdenes para trabajar con los rusos desde que se realizó la cumbre de Trump y Putin.

En Estados Unidos, el Congreso aprobó una ley que prohíbe la cooperación militar luego de que Rusia anexara Crimea en 2014.