Washington, Estados Unidos.
Estados Unidos anunció este miércoles una salva de sanciones contra más de 300 entidades, como la Bolsa de Moscú, con el objetivo de frenar la guerra en Ucrania y presionar a las instituciones financieras que tratan con Rusia, justo antes de la cumbre del G-7.
"Las acciones de hoy afectan a las vías que les queda (a Rusia) para obtener materiales y equipos internacionales, incluida su dependencia de suministros esenciales procedentes de terceros países", declaró la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, sobre estas medidas.
"Aumentamos el riesgo para las instituciones financieras que tratan con la economía de guerra de Rusia, eliminamos las posibilidades de evasión, y disminuimos la capacidad de Rusia para beneficiarse del acceso a tecnología, equipos, software y servicios informáticos extranjeros", añadió, citada en un comunicado.
- Las medidas de Washington afectan a entidades situadas en Rusia y en países como China, Turquía y Emiratos Árabes Unidos.
Entre ellas destaca la Bolsa de Moscú y varias filiales, con el objetivo de dificultar transacciones por valor de miles de millones de dólares, así como entidades implicadas en tres proyectos de gas natural licuado.
Además el Departamento del Tesoro amplía su definición del complejo "militar-industrial" ruso.
Actualmente los bancos extranjeros pueden ser sancionados por apoyar a la industria de defensa rusa pero en adelante también serán castigados si realizan transacciones con las personas y entidades rusas que ya han sido objeto de sanciones estadounidenses. De este modo la lista pasa de más de 1.000 a unos 4.500.
Esta nueva ronda de sanciones concierne a redes transnacionales y afecta a más de 90 individuos y entidades a nivel internacional, informó el Tesoro.
Estados Unidos considera que los bienes y servicios de estas redes extranjeras ayudan a Rusia en la guerra en Ucrania.
El anuncio de sanciones se ha hecho la víspera de la cumbre del G7 que se celebrará jueves y viernes en Italia, durante la cual el presidente estadounidense, Joe Biden, repetirá que "el tiempo no está de parte" del presidente ruso Vladimir Putin, según un portavoz de la Casa Blanca.
La cumbre también será una ocasión para anunciar "nuevas sanciones y medidas de limitación de las exportaciones", añadió la fuente.