Bogotá, Colombia.
Diez muertos y 65 heridos deja el estallido el jueves de un coche bomba en una academia de policía, en el sur de Bogotá, en lo que fue calificado como un acto de terrorismo.
El ministerio de Defensa confirmó que la fuerte explosión de la mañana fue producto de una "acción terrorista", la más grave que ha sacudido a la capital colombiana desde que disminuyó la intensidad del conflicto armado por cuenta del pacto de paz con la exguerrilla FARC a finales de 2016.
El atentado fue dirigido contra la Escuela de Oficiales General Francisco de Paula Santander, y hasta el momento deja nueve muertos, según un balance actualizado.
La Secretaría de Salud de Bogotá informó, por su parte, que 65 personas sufrieron heridas y están siendo atendidas en cuatro puntos hospitalarios. De momento, no hay un balance sobre el número de uniformados afectados por el ataque.
El vehículo detonó tras una ceremonia de ascenso de oficiales y cadetes.
Rosalba Jiménez, de 62 años y vecina del lugar, estaba abriendo su local de confecciones cuando de repente estallaron los vidrios.
"Estábamos abriendo cuando sentimos una explosión, pero pensamos que era la bomba (estación) de gasolina que queda aquí", relató a la AFP.
Pero "cuando volteamos a mirar a la escuela estaba el cielo gris de humo. La gente corría, las sirenas...horrible, horrible, parecía el fin del mundo", agregó.
Las fuerzas de seguridad cerraron el acceso a la prensa y un fuerte dispositivo de vigilancia regía en el sur de la ciudad, según periodistas de la AFP. En varios sectores de la capital se escuchaban sirenas.
"Todos los Colombianos rechazamos el terrorismo y estamos unidos para enfrentarlo. COLOMBIA se entristece pero no se doblega ante la violencia", escribió el mandatario en Twitter.
Vamos al lugar de los hechos. He dado órdenes a la Fuerza Pública para determinar los autores de este ataque y llevarlos a la justicia. Todos los Colombianos rechazamos el terrorismo y estamos unidos para enfrentarlo. COLOMBIA se entristece pero no se doblega ante la violencia.
— Iván Duque (@IvanDuque) 17 de enero de 2019
Duque, quien asumió el poder en agosto de 2018, ha endurecido la política antidrogas en el país con mayor producción de cocaína en el mundo, y ha fijado condiciones para reactivar los diálogos de paz con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), última guerrilla reconocida en el país.
- Ingreso abrupto -
La explosión se produjo después de una ceremonia de ascenso de oficiales.
Las primeras imágenes de la televisión local mostraron el movimiento de ambulancias alrededor del sitio del presunto ataque, y lo que parecen ser los restos de un vehículo en llamas.
Una funcionaria de salud de las Fuerzas Militares señaló a la prensa que al parecer el vehículo irrumpió "abruptamente" en la sede policial.
"Entró abruptamente, casi atropellando a los policías y enseguida fue la explosión", comentó Fanny Contreras.
Según su versión, "hubo otra pequeña explosión", aunque de momento las autoridades de la capital manejan la hipótesis de un solo estallido.
"He dado órdenes a la Fuerza Pública para determinar los autores de este ataque y llevarlos a la justicia", agregó Duque.
Con unos ocho millones de habitantes, Bogotá había sido sacudido por esporádicas acciones de terror en 2017.
En febrero de ese año, el ELN se adjudicó un atentado contra una patrulla policial que dejó un uniformado muerto y varios heridos de gravedad en el barrio la Macarena de Bogotá.
Ese mismo año, un atentado en un centro comercial de Bogotá dejó tres muertos y varios heridos. Las autoridades culparon del hecho al Movimiento Revolucionario del Pueblo (MRP), un grupusculo de izquierda.