Ciudad de México, México.

Cuarenta de los 93 casos de COVID-19 confirmados en México provienen de España, el mayor exportador de coronavirus a tierras mexicanas, informaron este miércoles las autoridades sanitarias en el aeropuerto internacional de Ciudad de México, donde no se ha restringido ningún vuelo extranjero.

En conferencia de prensa, el director general de Servicios de Salud Pública de la capital mexicana, Jorge Alfredo Ochoa, explicó que 40 casos de contagios vinieron de España, 24 de Estados Unidos, 9 de Italia, 5 de Alemania, tres de Francia y uno de Singapur.

Los otros 11 de los 93 casos confirmados fueron contagiados en México, aunque las autoridades mexicanas no lo consideran transmisión local sino contagios "asociados a casos importados".

El aeropuerto de la Ciudad de México dispone de 50 personas encargadas de vigilar las 24 horas del día las más de 90 mil personas que llegan cada día a la capital de México provenientes de vuelos internacionales, a quienes miden la temperatura con termómetros a distancia.

Los controles son más exhaustivos en los vuelos provenientes de China, Corea del Sur, Japón, Italia, Irán, Singapur, España, Francia, Alemania y Estados Unidos.

Cuando se detectan casos sospechosos de coronavirus, esas personas son trasladadas a los hospitales más cercanos a sus hoteles o domicilios, donde se les realiza una prueba sanitaria.

La responsable de la Unidad de Sanidad Internacional del aeropuerto, Yareli Pérez, informó que ninguno de los 286 casos sospechosos de febrero ni de los 356 detectados en el aeropuerto en lo que va de marzo dio finalmente positivo en COVID-19.

"No podemos restringir los vuelos a nuestro país. Esto debe obedecer a una situación de un nivel epidemiológico más avanzado", expresó Pérez, quien recordó que su unidad obedece a las directrices de la Secretaría de Salud del Gobierno federal.

Este miércoles aterrizaron en el aeropuerto de Ciudad de México vuelos provenientes de Barcelona, Nueva York, Dallas, Houston, Amsterdam, Bogotá y Lima, entre otros.

A diferencia de otros países latinoamericanos como Argentina, Colombia, Chile o Perú, México no ha cerrados sus fronteras ni ha impuesto restricciones a vuelos internacionales.

El Gobierno mexicano cree que el cierre de las fronteras o un eventual confinamiento de la población en sus casas tendría consecuencias "devastadoras" para la débil economía del país, que en 2019 tuvo una contracción del 0.1 %.

Las autoridades sanitarias consideran que México se encuentra todavía en una fase inicial de la pandemia, por lo que de momento solo han pedido el cierre de colegios, evitar eventos superiores a los 5 mil asistentes y mantener ciertas normas de higiene.