Por su parte, la compañía irlandesa de bajo coste Ryanair decidió anular a partir del viernes todos sus vuelos internacionales con origen o destino en Italia y todos los vuelos nacionales dentro del país desde este miércoles y hasta el 8 de abril.

"Ryanair sigue cumpliendo plenamente las directrices de la OMS y del gobierno nacional y las prohibiciones de viaje. La situación cambia a diario y a todos los pasajeros de los vuelos afectados por las cancelaciones se les ofrecen transferencias de vuelos, reembolsos completos o créditos de viaje", afirmó en un comunicado.

Con 9 mil 172 casos confirmados de covid-19 y un total de 463 muertos, según un balance realizado por la AFP en la base a informaciones oficiales a las 09h00 GMT, Italia es el segundo país del mundo más afectado por la epidemia después de China, donde surgió el virus en diciembre.

En un intento por frenar la propagación, las autoridades italianas decidieron de madrugada extender las medidas de confinamiento a todo el país.

Como consecuencia, el gobierno británico desaconsejó todos los viajes no esenciales a Italia y pidió a quienes lleguen de ese país que se pongan en cuarentena voluntaria durante 14 días.

Numerosas aerolíneas europeas redujeron considerablemente en los últimos días sus vuelos hacia y desde Italia debido a una drástica caída de la demanda.

Esta reducción de la actividad está costando muy caro a algunas de ellas. La compañía regional británica Flybe, que sufría desde hace tiempo problemas financieros, se declaró en bancarrota la semana pasada.

Y este martes, la aerolínea de bajo coste Norwegian Air Shuttle, tercera "low cost" de Europa y en dificultades financieras desde hace meses, anunció que anulará unos 3.000 vuelos desde mediados de marzo hasta mediados de junio, el 15% de su capacidad de transporte, debido a la reducción de la demanda causada por el coronavirus.