Ciudad de México, México
El banco central de México elevó este miércoles su pronóstico de crecimiento económico para este año, alineándolo con la expectativa del gobierno y aseguró que la inflación no está descontrolada pese a haber alcanzado máximos no vistos desde la crisis financiera del 2009.
El autónomo Banco de México ubicó su estimado para el Producto Interno Bruto (PIB) de 2017 en un rango de 1,5 por ciento a 2,5 por ciento, frente al estimado anterior de 1,3 por ciento a 2,3 por ciento, según su reporte trimestral de inflación.
La revisión llega después de que el ministerio de Hacienda subió la semana pasada su estimado, tras un desempeño económico mejor a lo esperado en el primer trimestre, y pese a que subsisten riesgos para México, especialmente la incertidumbre sobre la renegociación del Tratado de libre Comercio que mantiene con Estados Unidos y Canadá (TLCAN).
Para 2018, el ente emisor mantuvo su expectativa de crecimiento para la segunda economía de América Latina en un rango de 1,7 por ciento a 2,7 por ciento, agregó el documento.
"Este escenario no está exento de riesgos. La junta (de gobierno del banco central) considera que el balance de riesgos (para el crecimiento) está aún sesgado a la baja", advirtió el gobernador del banco, Agustín Carstens, en una conferencia de prensa.
Entre los riesgos a futuro, el banco citó una eventual postergación de inversiones por las dudas sobre el destino del TLCAN, la implementación de políticas proteccionistas en Estados Unidos, un menor flujo de remesas de dinero desde ese país y nuevos episodios de turbulencia en los mercados internacionales.
El PIB de México creció un 0,7 por ciento en el primer trimestre del año frente al periodo inmediato anterior, debido al avance de las actividades agrícolas y del vasto sector de servicios.
Tras este resultado, que fue algo mayor a un cálculo oficial preliminar, el Ministerio de Hacienda revisó al alza su pronóstico destacando "la resistencia de la economía ante choques externos".
-La inflación no está fuera de control-
La mejora de los estimados oficiales confirma la idea de que la economía mexicana ha resistido hasta ahora la amenaza que suponía la administración del presidente estadounidense Donald Trump y su retórica hostil contra el libre comercio.
México envía a Estados Unidos alrededor de un 80 por ciento de sus exportaciones.
Con relación a la inflación, que se aceleró hasta la primera quincena de mayo a una tasa anual del 6,17 por ciento, la más alta desde abril de 2009 y por arriba del objetivo del banco, del 3,0 por ciento más o menos un punto porcentual, Carstens aseguró que no está "fuera de control".
El banquero explicó que la incertidumbre sobre la relación con Estados Unidos y su impacto en el tipo de cambio, la liberación de precios de los combustibles a inicios de año y un aumento del salario mínimo, fueron choques simultáneos y persistentes que presionaron la inflación al alza.
"Junto con ello ha venido un accionar muy decidido y yo diría oportuno del Banco de México para enfrentar todos estos choques", destacó Carstens, aludiendo al ciclo alcista en su tasa de referencia iniciado a fines de 2015.
Desde diciembre de 2015 a la fecha, Banco de México ha aumentado su tasa de interés de referencia en 375 puntos base, pasando del 3,0 por ciento al 6,75 por ciento.
El banquero estimó que "en ausencia de choques adicionales" la inflación anual debería estar más cerca del objetivo del 3,0 por ciento al cierre del 2018.