Buenos Aires, Argentina.

Un ataque con explosivos caseros causó daños pero no víctimas este martes en un local del oficialista Frente de Todos ubicado en la ciudad argentina de Bahía Blanca, informaron autoridades.

"Está confirmado que fue un artefacto explosivo no reglamentario con el poder suficiente para producir daños. Es un mensaje duro y fuerte de violencia política y ataque a la democracia", dijo Federico Susbielles, dirigente del Frente de Todos de Bahía Blanca, 600 km al suroeste de Buenos Aires.

La fuerte explosión ocurrió durante la madrugada y causó destrozos de vidrios, mampostería y muebles del local que terminó con su persiana y puerta de ingreso arrancada, según imágenes divulgadas por el Frente de Todos.

En los alrededores del lugar se hallaron esparcidos panfletos con amenazas.

"Ahora a cuidarse traidores, sabemos donde viven. HARTOS!!! DE TODOS USTEDES", rezan los panfletos que advierten sobre el inicio de un "purga".

La nota contenía insultos a políticos, sindicalistas, periodistas y jueces además de pronunciase contra políticas que "nos tratan como a ganado" o "nos quitan la libertad".

El ataque coincide con una nueva convocatoria que realizaron para este martes sectores anticuarentena autodenominados "libertarios" para manifestarse en el Obelisco contra las restricciones sanitarias al argumentar que avasallan derechos individuales, en desafío al confinamiento obligatorio decretado por el gobierno.

Esta agrupación es la misma que un año atrás durante una convocatoria en la Plaza de Mayo colocó bolsas mortuorias que simulaban contener cadáveres en las rejas de la Casa de Gobierno, con nombres de dirigentes sociales, políticos y miembros del gobierno.

La explosión ocurrió cerca de las 03:00 de la madrugada local y la onda expansiva causó la rotura de vidrios en propiedades vecinas.

El alcalde de Bahía Blanca, Héctor Gay, expresó su "enérgico repudio" al hecho a través de las redes sociales y lo calificó como "un acto de violencia que atenta contra la democracia y principalmente contra todos los bahienses y la sociedad en general".

El ministro de Desarrollo de la provincia de Buenos Aires, Andrés Larroque, expresó su preocupación y abogó por "no naturalizar estos episodios de violencia".

La policía investiga las imágenes de las cámaras de seguridad de los alrededores.

El ataque ocurrió en medio del confinamiento obligatorio que rige en Argentina desde el sábado y por nueve días para frenar el avance de la pandemia de covid-19 que ha causado más de 3,5 millones de contagios y casi 75.000 muertos sobre 45 millones de habitantes.