En proceso orden para suspensión de presidente municipal de Lagos de Moreno
Presidencia Municipal de Lagos de Moreno




Por Luz Atilano

Son varios los procedimientos legales iniciados desde hace algunos años por empleados y ex empleados en contra del Ayuntamiento de Lagos de Moreno. Mismos que han derivado en una serie de sanciones que podrían surtir efecto antes de que culmine la actual administración.

Al menos ocho casos abiertos

Y es que, aunque prácticamente nada se ha dado a conocer al respecto, en la actualidad se sabe de al menos ocho casos abiertos; entre ellos el proceso de reinstalación de dos empleados despedidos injustificadamente, el pago de sueldos caídos a tres empleados sindicalizados y a tres no sindicalizados, como ocurre con el caso de Óscar Dávila, ex director de Turismo, por cuyo proceso se demanda ya poco más de un millón y medio de pesos.

En proceso, suspensión de presidente municipal

Anselmo Domínguez Rodríguez, secretario general del Sindicato de Servidores Públicos Municipales de Lagos de Moreno, declaró para Señal Informativa Lagos que se trata de procedimientos a la espera de resoluciones definitivas y de, en determinados casos, sanciones emitidas por el Tribunal de Justicia del Estado de Jalisco como consecuencia al desacato de las autoridades municipales, entre ellas, la suspensión temporal del presidente municipal en turno:

“La otra, me decía también Raúl Arellano (titular de  su bufete jurídico) que está por salir, y que no entiende él por qué se está deteniendo ese proceso en el Congreso, de la suspensión al presidente municipal en turno por 15 días sin goce de sueldo por no acatar el laudo del Tribunal… de un compañero al cual sí se le pagaron sueldos caídos pero no se cubrió la totalidad del laudo, porque están demandando al Ayuntamiento, el Tribunal, de que también tiene que pagar o inscribirlo en lo que corresponde a la Dirección de Pensiones del Estado. […] Supuestamente, nada más son detallitos técnicos que deben ajustarse en el Congreso del Estado, para que a su vez el Congreso del Estado lo remita al Tribunal y el Tribunal venga y notifique al Ayuntamiento a partir de  cuándo queda suspendido el presidente municipal”.

Dicha suspensión sería de funciones y salario, y en esta ocasión recaería únicamente en Luis Jaime Ruiz Mojica, presidente municipal interino. No obstante, de no acatar el laudo determinado por el Tribunal, se haría efectiva una segunda suspensión que también incluiría al síndico y al tesorero municipal.

Desacato, ineptitud o dolo

Estos asuntos han pasado de administración en administración desde hace varios años, sin ser resueltos, al inicio de cada gobierno siempre con el pretexto de que serán revisados para su debida atención y que, como ha compartido para este espacio informativo una de las personas afectadas (cuyo nombre omitimos por su seguridad), sólo afectan al erario público:

“Sabemos que cuando se llega una demanda es ante una omisión que tuvieron nuestras autoridades en el caso de responsabilidad, ahorita, con los trabajadores para cumplir en tiempo y forma. Se dice que la ley es rápida y expedita, no lo he visto así… si los conocen, la ley y el derecho, los omiten, porque no soy la única que está metida en un proceso laboral, en una demanda ya ganada, en un laudo ya sentenciado y al que ellos han incurrido en un desacato. Esto es grave, porque no es sólo mi procedimiento, es el de varios compañeros como yo, que están en la misma situación y que hemos recurrido a las autoridades en la Junta Local de Conciliación y Arbitraje y Escalafón en la ciudad de Guadalajara y que inclusive se han girado instrucciones, hasta Pensiones del Estado o Contaduría mayor de hacienda para que cumplan en tiempo y forma con lo correspondiente a las jubilaciones, a las reinstalaciones, como es el pago de salarios caídos de las compañeras y de otros trabajadores que también han ganado la demanda.

¿De qué nos habla esto?, nos habla de una ineptitud, que tienen o desconocen, o lo hacen con dolo… de no acatar, y no acatar es un problema muy grave porque cuando éstos generan a través del tiempo y los años un rezago monetario, económico, le pega al erario… Cuesta dinero, y cuesta mucho… pero no es por nosotros, es por la mala acción  que tienen ellos, el dolo, la mala fe y la omisión en la que incurren”.

Señala, este tipo de casos, junto a la situación que atraviesan actualmente los empleados de áreas operativas del Ayuntamiento en lo que a seguridad laboral se refiere, se hace evidente no sólo la libertad con la que las autoridades desacatan órdenes superiores a su jurisdicción, sino además el desinterés que éstas tienen por quienes responden directamente al servicio del municipio, sus empleados.