Por Gabriela Arreola

Puerta La Chiripa, comunidad conocida también como La Pascuala, es una ranchería ubicada en la zona norte de Lagos Moreno, a unos cuantos kilómetros de la delegación de Los Azulitos. Allí son varias las carencias que se pueden observar a simple vista pues, por ejemplo, las vialidades para llegar al lugar se encuentran en pésimas condiciones y una vez dentro de la comunidad todas y cada una de las calles son de tierra.

Espacios para diversión y practicar deporte

Pero además del tema de obra pública, otras necesidades tienen que ver con la falta de lugares para que los habitantes de Puerta La Chiripa puedan tener un momento de recreación, sobre todo los pequeños y los jóvenes, dicen algunas madres de familia, pues en las escuelas el espacio de juego para los menores es muy reducido.

«Aquí hacen falta muchas cosas, simplemente un parque para que jueguen los niños, aquí no tienen donde jugar; unas resbaladillas aquí enfrente, unos juegos para los niños».

«Simplemente, los niños no pueden salir a jugar porque no tienen canchas, no tienen ningún algo para que se diviertan».

«De la entrada para la capilla, la calle principal (necesitamos) una plaza, para estar ahí los fines de semana, divertirnos. Unas canchas para que los niños jueguen, de futbol, basquetbol, béisbol».

La comunidad sin recursos y sin ayuda del Ayuntamiento

Las madres de familia y abuelas, incluso, indican que el terreno para la construcción de las canchas o de un parque para que los menores y jóvenes tengan un sitio para hacer deporte o jugar, ya ha sido asignado, al parecer como donación de los ejidatarios de la comunidad. No obstante, el recurso para el acondicionamiento y la compra de todo lo necesario para los espacios es muy alto y la comunidad no puede por sí sola costearlo, y tampoco han recibido apoyo por parte de la autoridad gubernamental a nivel municipal.

Asimismo, los habitantes comentan que los menores de edad que acuden al jardín de niños o a la primaria de la comunidad, requieren incentivos y apoyos para seguir con su formación, como becas y desayunos escolares.

«Una beca para que estudien, unos desayunos, porque aquí no hay desayunos y aquí hay niños que ocupan desayuno, porque aquí hay niños que en realidad no tienen mucho alimento. Los del kínder, los de primaria, hay niños que sus mamás no tienen para llevarles desayuno».

Puerta La Chiripa no cuenta con secundaria o preparatoria, por esta razón, los jóvenes que desean seguir con su formación y, sobre todo, los que tienen la fortuna de que sus familias tengan cierta solvencia económica, tienen que trasladarse de lunes a viernes hasta Los Azulitos.

«Como los que estudian tienen que ir muy lejos para estudiar, y van hasta Azulitos a la secundaria y a la prepa, y ya de ahí tienen que salir fuera para poder estudiar», dicen.

Sin embargo, el gasto que los padres y familiares tienen que hacer para que sus hijos puedan estudiar resulta alto en muchas ocasiones, debido a que los jóvenes tienen que pagar transporte, comida y cuotas en las escuelas. La vida en las rancherías no es fácil para las familias pues las fuentes de empleo son escasas y los trabajos que hay no son bien pagados, es por eso que las personas creen necesario que haya apoyos para los jóvenes también en este sentido.