Robin Fly, monólogo de Alexia Alexander que explora los sueños y desilusiones al cumplir 30 años
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Guadalajara, Jalisco. 

Llegar a los 30 años es parteaguas en la vida del ser humano, para muchos es el punto de partida en donde se dejó la juventud y comienza la madurez en la cual se deben de alcanzar ciertas metas, expectativas que si no se tienen se considera como un fracaso.

Para otros, es la edad en donde se comienza a cuestionar el sentido de la vida

¿Qué se ha logrado? ¿En dónde estamos? ¿Hacía dónde se va?

Esto le pasó a la actriz Alexia Alexander, quien cercana al tercer piso escribió la obra Robin Fly, para hablar acerca de su sentir y poder vivir una catarsis escénica:

"Es una obra unipersonal que su trama radica en una actriz que está  punto de cumplir los 30 años y al sentirse fracasada tanto personal como profesionalmente, lo único que tiene de esperanza es reencontrarse con un ex amante y toma carretera para ir a verlo.

Dentro de este trayecto tiene reflexiones sobre lo que ha sido su vida y como no ha cumplido con esas expectativas. Al final hay un giro de tuerca en el que se entera de algo y que la devuelve a este lugar oscuro que le hizo comenzar el viaje".

Alexia Alexander, quien siempre ha soñado con una fructífera carrera en cine, explica que, aunque llegar a la pantalla grande continúa dentro de sus objetivos principales, es a través del teatro que ha logrado entender más sobre su propio camino:

"Encontré la manera más práctica de regresar al teatro haciéndolo yo sola, y por otro lado busco tomar un taller y me encuentro con  Xavier Villanova que él da talleres de dramaturgia y estaba dando un unipersonal y para mí fue lo que complemento. Nunca quise hacer este tipo de formato".

A la postre, lo aprendido le dio las bases de llevar a cabo el montaje con el cual ya lleva 32 representaciones y con el cual se presentará este viernes y sábado en el Teatro María Teresa, a las 20:30 horas y a las 18:30 horas respectivamente.

La actriz señala que cualquier persona se podrá ver identificada con el personaje que ella misma interpreta y que el espectador vivirá una montaña rusa de emociones. De la génesis del proyecto comparte que fue por la necesidad de plasmar su sentir y a la par regresar a las tablas del teatro.

"Al final sí es lo más gratificante. Cuando termino funciones y veo que la gente está conmovida, reconecta y se reconocía en mi texto nos sentimos unidos.

Es como ver la entrevista con un artista que admiras, se vulnerabiliza y ves la honestidad con la que habla crees que son mejores amigos, eso pasa un poco y es muy lindo y es lo más bonito con lo que yo me puedo quedar del proceso que he tenido".

  • Los boletos para la obra tienen un costo de 230 pesos.

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Héctor Navarro