Quema clandestina y desconocimiento del retiro del tule en Jalisco, pone en riesgo a aves migratorias
Fotografía: Isabel González




Guadalajara, Jalisco.

Quema clandestina de tule por parte de los ganaderos o agricultores, así como desconocimiento por parte de las autoridades de Jalisco de cómo hacer el retiro de esta planta acuática, son dos factores que viene a poner en riesgo el ecosistema:

  • peces, plantas, aves, aquellos seres vivos que hacen de su hogar el lago, como lo es la Laguna de Atotonilco en el municipio de Villa Corona que el pasado 2 de diciembre registró un incendio en la vegetación de tule

El director general del Instituto de Desarrollo Ambiental Corazón de la Tierra en Jalisco, Alejandro Juárez detalló que quemar el tule no funciona para el manejo de la planta acuática. 

“El fuego genera riesgo de diferentes tipo y no es la mejor manera de manejar el tule porque destruye sólo la parte superior de las plantas no afecta las raíces.

La subterránea sigue presente y si la lógica es quemar para deshacerse de esa situación y permitir el paso de la visión no es una respuesta correcta.

Además lo que se genera en el agua, en el ecosistema es presencia masiva de materia orgánica muerta y trae afectaciones fuertes en otras plantas y especies de alto valor para el ecosistema”. 

Y agregó que sí las autoridades están interesadas en dar un buen manejo al tule deben centrarse en trabajar con los ganaderos y agricultores, ya que el 50 por ciento de los fertilizantes químicos que utilizan en sus cultivos se va a los cuerpos de agua.

Lo que genera un excedente de nutrientes y el tule se multiplica.

Por su parte el integrante de la Junta Intermunicipal Para la Protección del Medioambiente y Desarrollo Sustentable del Lago de Chapala (Aipromades), Juan Miguel Vázquez Godínez resaltó por qué es complicado el manejo y retiro del tule en los cuerpos de agua como es el caso del Lago de Chapala y la Laguna de Atotonilco.  

“En el tema del tule es muy difícil, imaginemos que sí podemos retirar una cierta cantidad de tule de un cuerpo de agua pero a veces los tiempos no nos dan porque anidación en el tule hay casi todo el año, de una especie de otra.

Luego vienen las migratorias, entonces los tiempos para trabajar el tule y según las zonas es difíciles”. 

Y argumentó que la quema clandestina de tule es otra realidad de la que casi no habla y trata.

“He vivido que en el río Santiago, los agricultores inconscientemente prenden los tulares y lo hacen de manera clandestina porque a ellos en su caso el tule les causa problemas de flujo de caudal en los sistema de riego”. 

Al momento no hay una cuantificación oficial que dé fe de cuántas y cuáles especies de aves, peces y plantas, se vieron afectadas por el incendio en la Laguna de Atotonilco en Villa Corona. 

Como parte del contexto se sabe que el 8 de noviembre el presidente municipal de Villa Corona solicitó al Congreso del Estado apoyo para gestionar la máquina weedo para el retiro del tule.


María Ramírez Blanco