Sierra de Comanja: la sierra de distintos colores




Por Luz Atilano

Es innegable la gran riqueza natural con la que cuenta Lagos de Moreno. Y es que, debido a la región en la que se encuentra el municipio, ésta puede apreciarse en muy distintas formas: a través de mesetas, serranías, cuerpos de agua, sitios áridos, paisajes rocosos, entre otros.

Un sitio disfrutable a la vista

Por el lado este, justo en los límites entre Jalisco y Guanajuato, y específicamente entre Lagos y León, es donde se encuentra la Sierra de Comanja, cuyo nombre lo recibe de aquel poblado que fue habitado y disputado por chichimecas y españoles durante La Colonia (Comanja de Corona), y constituye la zona montañosa más importante de Lagos.

Un sitio disfrutable a la vista de cerca o desde lejos, como opina la doctora Irma Guerra Márquez, cronista colegiada e investigadora del Centro Universitario de los Lagos:

“El punto más alto de esta sierra llega a 2 mil 630 metros sobre nivel del mar y hay escurrimientos y elevaciones que le brindan un contraste muy hermoso a Lagos y pues nos brindan un paisaje natural que podemos apreciar. Yo siempre digo que esta sierra todos los días muestra colores diferentes en las diferentes horas del día… cuando la ves al amanecer presenta algunos días un color, otros días otro, depende de las estaciones del año. Al mediodía la puedes ver de otra manera y al atardecer también de otra y pues es un paisaje muy bello que podemos siempre disfrutar (incluso) desde aquí”.

De día a distintas horas o de noche bajo la luz de la luna, la vista de la Sierra de Comanja es siempre peculiar. Sobre ella existen varias alusiones en la literatura laguense, como aquella que exalta la costumbre de tomarla como indicador del tiempo cuando las nubes se aproximan a ella, pues anuncia que las lluvias pronto llegarán a la cabecera.

“Dicen personas de otras generaciones que cuando las nubes se forman o vienen, están en la Sierra de Comanja seguro va a llover, ‘por eso siempre se espera al agua mirando hacia la Sierra de Comanja’, como lo señaló Hugo Gutiérrez Vega. La Sierra es una referencia constante también en los escritores; Carlos González Peña, por ejemplo, señaló que era una sierra de azulada crestería, así la describió… y que desde ahí domina la perspectiva hacia el orto. Entonces, pues es una descripción muy bella la que nos ofrece en el prólogo de la Antología de poetas laguenses”.

Pese a las estaciones del año, de la hora o el momento en el que se le mire, esta es la zona más verde del municipio. Y aunque no se puede ignorar el lamentable grado de afectación que presenta debido al descuido en el que se encuentra, su vegetación es rica y dominan en ella los bosques de encino y de pino; robles colorines, palo colorado y nogales. Además de que alberga a animales como coyotes, conejos, serpientes de distintas especies, e incluso habitantes de comunidades cercanas han llegado a observar pumas.

Fuerte del Sombrero

Y, por otro lado, quizá uno de los elementos más importantes de la riqueza de esta sierra es su historia, pues además de su importancia económica durante la época colonial gracias a la actividad minera (también muy rica); y de haber sido refugio y sustento de tribus prehispánicas y semi nómadas, en ella se erigió el Fuerte del Sombrero. Guerra Márquez profundiza al respecto:

“Y bueno, algo muy significativo de la Sierra de Comanja es que en este lugar se ubica el sitio donde se construyó el Fuerte del Sombrero, que fue un bastión donde se refugiaron muchos insurgentes comandados por Pedro Moreno y es en una de las partes más altas de la sierra, que tiene precipicios y acantilados naturales muy hermosos. Entonces era un lugar de refugio, era como una fortificación natural que todavía completaron con algunas murallas para resguardarse de ataques, que bueno… de cualquier manera sí fueron sitiados y vencidos”.

Desde luego, todos estos elementos que conforman la Sierra de Comanja la vuelven un sitio rico y especial. Por lo que, concluye con la cronista, se vuelve necesario prestar mayor atención en la protección del lugar y atender serios problemas que la aquejan en la actualidad, como podrían ser la irresponsable explotación minera, los incendios y la contaminación en diversos sentidos.