Londres, Reino Unido.

El Reino Unido disminuyó el lunes en un escalón su nivel de amenaza terrorista, situándolo en el tercer nivel en una escala de cinco y en el más bajo registrado en el país en más de cinco años.

El nivel de amenaza bajó así de "severo" a "sustancial", lo que significa que los servicios de seguridad británicos consideran como "probable" un atentado terrorista.

La decisión fue anunciada por el ministerio británico de Interior pero tomada de forma independiente por el Centro Conjunto de Análisis del Terrorismo (JTAC), que cada seis meses lleva a cabo una revisión formal del nivel de amenaza.

"Pese a la reducción del nivel de alerta, es terrorismo sigue siendo una de las amenazas más directas e inmediatas para nuestra seguridad interior", advirtió la ministra Priti Patel, al tiempo que llamó a los británicos a "mantenerse vigilantes".

En agosto de 2014, el nivel aumentado de "sustancial" a "severo" -cuarto nivel, que designa un atentado como "muy probable"- en respuesta a los conflictos en Siria e Irak.

En 2017, la amenaza se elevó brevemente en dos ocasiones a "crítica", el nivel máximo que indica que un ataque es "muy probable en un futuro próximo".

El Reino Unido sufrió ese año atentados terroristas en Mánchester y Londres reivindicados por el grupo yihadista Estado Islámico (EI).