El Gobierno de Honduras lamentó hoy la muerte de un migrante hondureño durante un enfrentamiento con federales mexicanos tras cruzar la frontera con Guatemala, en su intento por llegar hasta EE.UU., y pidió investigar el suceso.

En un comunicado de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Honduras indicó que "lamenta profundamente" la muerte del hondureño Henry Adalid Díaz Reyes, quien este domingo recibió el impacto de una bala de goma.

Díaz Reyes, quien recibió el golpe en la cabeza, falleció cuando era trasladado por bomberos guatemaltecos hacia un centro asistencial en el municipio de Ayutla, en el departamento suroccidental de San Marcos.

"Como Gobierno rechazamos cualquier forma de criminalización y violencia contra las personas que migran, y pedimos que este hecho se investigue", enfatizó el Gobierno hondureño.

Decenas de migrantes hondureños que buscan llegar a Estados Unidos, derribaron este domingo la valla metálica que divide a Guatemala y México y cruzaron a ese país.

Honduras expresó además su solidaridad con los familiares de Díaz Reyes y reiteró "todo el apoyo para la repatriación de su cuerpo lo antes posible".

Además, instó a los hondureños que intentan llegar a Estados Unidos a "buscar los medios puestos a su disposición por el Gobierno para lograr un retorno seguro a sus hogares para no poner en riesgo su vida y la de sus familiares", según el boletín.

Díaz Reyes es el tercer hondureño que ha muerto en el camino desde que una caravana, ahora formada por unas 7 mil personas, salió el día 13 de la ciudad de San Pedro Sula con dirección a Estados Unidos y gran parte de ella marcha por México actualmente.

Los otros dos son el hondureño Melvin Josué Gómez, quien murió en México, y Germán Ramírez, quien falleció en Guatemala.

El Gobierno dijo que los hondureños que buscar llegar a Estados Unidos "deben respetar las leyes y la soberanía de los países en tránsito".

"Los países de tránsito están autorizados por el derecho internacional para ejercer su soberanía, aplicando sus leyes migratorias por medio de sus autoridades y que por tanto deben ser rigurosamente respetadas", añade el comunicado de la Cancillería hondureña.

Una segunda caravana, de unas mil 500 personas, está atravesando Guatemala dispersa en varios grupos que también tiene a Estados Unidos como destino final.

Un total de 4 mil 67 hondureños que desistieron de seguir en la caravana han regresado a su país de manera voluntaria, según cifras del Instituto Nacional de Migración.

Unos 139 inmigrantes hondureños de la caravana retornaron este domingo desde México en un avión de la Policía Federal mexicana, informó la primera dama de Honduras, Ana García.

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha adoptado una postura muy dura, amenazando con enviar el Ejército a la frontera, y ha asegurado que recortará "sustancialmente" la ayuda económica que concede a Guatemala, Honduras y El Salvador como represalia por el avance de los migrantes, al tiempo que ha arremetido contra México por no detenerla.