La Habana, Cuba.

En un inesperado giro, el gobierno cubano modificó este miércoles algunas de las normas para el trabajo privado aprobadas hace 5 meses y que debían entrar en vigor el viernes, en medio de confusión y malestar.

Dos resoluciones publicadas en la Gaceta Oficial y explicadas por altos funcionarios en la televisión modifican las disposiciones que habían causado mas irritación.

Fue rectificada la disposición que limitaba a una sola licencia (oficio) por persona el ejercicio del trabajo privado y se dispone que "las personas naturales pueden ser autorizadas a ejercer más de una actividad, siempre que cumplan lo regulado para el ejercicio del trabajo por cuenta propia".

La limitación del número de plazas para clientes en restaurantes, bares y cafeterías a 50 sillas fue eliminada.

Ahora los topes "estarán en correspondencia con la capacidad de los locales", señala la resolución firmada por Margarita González, ministra de Trabajo y Seguridad Social.

Según dijo González a la televisión estatal, los trabajadores privados pasaron de 157 mil en 2010, cuando el gobierno comenzó una apertura en ese sector, a 588 mil al cierre de octubre de este año, el 13% de los ocupados en el país.

El 87% restantes son fundamentalmente trabajadores de empresas estatales, campesinos privados y cooperativistas.

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Otra modificación concierne a la obligatoriedad de una cuenta bancaria fiscal de los trabajadores privados donde se reflejaran todas sus actividades.

La ministra de Finanzas y Precios, Meisi Bolaños, derogó esa disposición "en aras de evitar dispersión legislativa", según el texto publicado en la Gaceta Oficial.

Bolaños explicó a la televisión que la cuenta será obligatoria para seis actividades: "servicio gastronómico en restaurantes, servicio gastronómico en cafetería, servicio de bar y recreación, arrendador de vivienda, habitaciones y espacios y servicios de construcción", lo que afecta a unas 80 mil personas, el 13% de los privados.

Son "actividades complejas en su operación, no solo porque generan altos ingresos, sino porque también generan gastos", añadió.

Dijo que la apertura y operación de esas cuentas será "gradual" y que en ellas el titular sólo reflejará las operaciones mercantiles de su negocio, pudiendo tener otras cuentas bancarias personales independientes.

La viceministra de Trabajo y Seguridad Social, Marta Feitó, se refirió a "malas interpretaciones" de algunas disposiciones, como la que señala que el arrendador de habitaciones no puede ofrecer servicio de alimentos a sus clientes.

"Se puede dar el servicio de alimentación" dijo, "pero se requiere una licencia sanitaria que otorga en ministerio de Salud Pública".