Saraqib, Siria.
Las fuerzas del régimen sirio bombardearon este jueves posiciones rebeldes y de grupos yihadistas en la provincia de Idlib, en el noroeste, y lanzaron pasquines para pedir a los habitantes de este enclave insurgente que se rindan.
El presidente sirio Bashar Al Asad advirtió hace poco que esta provincia, fronteriza con Turquía y la última que todavía escapa a su control casi en su totalidad, es una de las prioridades de su ejército.
El jueves, un periodista de la AFP en el lugar vio aviones militares lanzando folletos que piden a la población "unirse a la reconciliación como lo han hecho numerosos de nuestros compatriotas en Siria".
Los llamados acuerdos de reconciliación, que en realidad son una forma de capitulación de los grupos rebeldes, se han aplicado en varias regiones del país. Estos acuerdos implican un alto el fuego y el traslado de algunos rebeldes hacia algunas zonas de Siria a cambio de que el régimen retome esos territorios.
"¿Hasta cuándo viviréis con vuestra familias con miedo y preocupación? (...) La guerra está llegando a su fin, es hora de poner fin a la efusión de sangre y a la destrucción", reza uno de los textos firmados por la comandancia de las fuerzas armadas sirias.
El jueves también hubo disparos de artillería y cohetes alrededor de Jisr Al Shughur, una ciudad del suroeste de la provincia de Idlib, según el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos (OSDH).
"Estos bombardeos son el preludio a un asalto pero todavía no hay avances [de las fuerzas del régimen] en tierra", dijo a la AFP el director del OSDH, Rami Abdel Rahman.
"Hay refuerzos militares, incluyendo soldados, equipamiento, vehículos y municipios, que están llegando a la región desde el martes", añadió.
Los refuerzos están concentrados en tres puntos controlados por el régimen: en la provincia vecina de Latakia (al oeste de Jisr Al Shughur), en la planicie de Sahl Al Ghab (en el sur de Idlib) y en una parte del sureste de la provincia de Idlib.
El periódico prorrégimen Al Watan confirmó el jueves que las tropas del ejército bombardearon posiciones rebeldes y yihadistas en la provincia de Idlib.
Esta provincia cayó en manos de la oposición en 2015 y está totalmente rodeada por territorios en manos del régimen.
Cerca de un 60% de la provincia está bajo control de Hayat Tahrir Al Sham (HTS), un grupo yihadista dominado por la antigua filial de Al Qaida. El resto está repartido entre varios grupos rebeldes.